Rafa y Xisca: una boda sin teléfonos móviles y con muchas celebridades
La esperada boda de Rafa Nadal y su novia Xisca Perello se desarrollará en la más estricta privacidad, en una alejada península fuera del alcance de periodistas y curiosos.
A pesar de los esfuerzos de la pareja por mantener toda la organización de su matrimonio en total secreto, algunos detalles se han ido filtrando, como la petición a todos los invitados y al personal de no llevar teléfonos móviles, así como la obligación de las empresas que participan en la boda de firmar un compromiso de confidencialidad.
El evento tendrá lugar en un castillo casi inaccesible del siglo XVII llamado “La Fortaleza”, que ocupa la península de Punta Avançada en Mallorca, el cual fue alquilado por tres días para que la familia pase allí el fin de semana. Resulta ideal además porque es imposible tomarle fotografías desde el mar o tierra.
Rafael Nadal y Maria Francisca Perelló en noviembre de 2011 en Londres, Inglaterra. | Foto: Getty Images
Según reportó Última Hora, la mayoría de los invitados solo podrán ingresar en autobuses por la puerta principal del Aeródromo Militar, aunque hay acceso a la península por el aire y por mar para invitados especiales.
Se estima que la lista de invitados es de alrededor de 350 personas entre familiares y amigos muy próximos a los novios, pero ha habido mucho hermetismo sobre quiénes asistirán, aunque se espera la presencia de conocidos tenistas, futbolistas, actores, empresarios y hasta de los reyes Juan Carlos y Sofía.
Francisca Perello apoyando a Rafael Nadal en el US Open 2015. | Foto: Getty Images
La ceremonia será oficiada por el sacerdote Tomeu Catalá, presidente de Projecte Home, quien se ha permitido hablar sobre los novios y el amor que ha podido comprobar que los une, y se expresó con mucho afecto sobre Nadal:
“Rafa Nadal es un ejemplo por los valores que transmite. Es por esto que está rodeado de gente que le quiere. Rafa Nadal es una persona que ama y que es amado, y eso no se compra ni se vende”, dijo Catalá, quien conoce a la familia Nadal hace muchos años.
Los novios estuvieron recientemente en las Bahamas, y se especula que fue una luna de miel adelantada, ya que el tenista debe estar de regreso nueve días después de su boda que se celebrará el 19 de octubre, para participar en el torneo de París, si logra mejorar de su reciente lesión en la muñeca.