Abuela de 48 años era "tímida" antes de convertirse en fisicoculturista: su inspiradora historia
Esta fisicoculturista trabaja duro para conseguir sus impresionantes resultados, terminando su rutina diaria con 20 minutos en la caminadora.
Robin Hills, una funcionaria correccional de Ontario, Canadá, supo desde pequeña que le encantaban los deportes. Se destacó por su atletismo en la escuela hasta que abandonó la secundaria en 1989.
En 1989 tomó la decisión de inscribirse en un gimnasio y allí descubrió su verdadera pasión: el levantamiento de pesas. Aunque siempre fue una mujer muy tímida, asegura que el fisicoculturismo le dio una nueva confianza en sí misma.
SUS INICIOS
Aunque siempre le gusto el deporte, de adolescente era alta y muy delgada. En la escuela le gustaba jugar béisbol, básquetbol y vóleibol, además practicaba el atletismo.
Una vez que dejó la secundaria, no quiso dejar de estar en forma, así que se inscribió por primera vez en un gimnasio. Allí tuvo su primer acercamiento al levantamiento de pesas y se hizo "adicta de inmediato".
MADRE Y ABUELA
Con 48 años de edad, Hillis ha conseguido resultados increíbles gracias a su esfuerzo. Cabe destacar que esta canadiense tiene dos hijas Courtney, de 21 años, y Katey, de 23.
Además, es abuela de tres nietos: Wynter, Avianna y Abel, pero eso no la detiene de dedicarse a lo que de verdad la apasiona.
“No creo que sea más difícil lograr estos resultados después de tener hijos, pero también depende del perfil hormonal, el metabolismo y el estilo de vida de todos", afirma.
AMOR POR LAS PESAS
Su amor por el deporte la llevó a participar en 1993 en su primera competencia de fisicoculturismo. La deportista quedó en segundo lugar con un peso de 61 kilos.
En la actualidad Robin, quien acumula 32 años de experiencia en levantamiento de pesas, luce unos bíceps que miden 43 centímetros y pesa casi 90 kilos.
En entrevista con Small Joys TV, dijo que no contaba las calorías que ingiere al día, pero come cinco veces al día entre sus sesiones de entrenamiento. Ella empieza su día levantándose a las seis de la mañana para hacer cardio en ayunas durante 20 minutos.
Después de hacer su segunda comida, va al gimnasio para entrenar y hace 12 minutos de cardio. También pasa 10 minutos en una sauna antes de hacer su tercera comida.
INSPIRACIÓN PARA OTRAS MUJERES
Las mujeres fisiculturistas que aman esta disciplina deben combatir a diario contra las críticas, el machismo y los estereotipos. Hillis no es la excepción, por lo que recomienda a las niñas no prestar atención ante los comentarios negativos de otros.
Con su historia, la abuela de tres busca “inspirar a las niñas más jóvenes a hacer lo que aman y no prestar atención a las opiniones de la gente. Espero inspirar a todos a amarse a sí mismos y hacer lo que los hace felices".
Tras hacerse famosa, Robin también ha recibido un sin fin de reacciones en las redes sociales, tanto positivas como negativas. En su mayoría son positivas: "Rara vez recibo comentarios negativos en mis redes sociales o en persona", sostiene.