Hombre devastado advierte a todos después de que su amado perro muere tras nadar en agua salada

O.G., el hermoso labrador, comenzó a mostrar síntomas de deshidratación, que incluyen inestabilidad y diarrea, poco después de jugar en las olas.

Un hombre de Florida, cuyo Labrador Retriever negro murió después de un viaje a la playa, está advirtiendo a otros dueños de mascotas sobre la intoxicación por agua salada.

Chris Taylor, de 29 años, tuvo que sacrificar a su amado perro O.G. el pasado miércoles 11 de julio después de que la mascota de seis años ingiriera agua de mar en una playa del área de Tampa Bay.

O.G. comenzó a mostrar síntomas de deshidratación, que incluyen inestabilidad y diarrea, poco después de jugar en las olas y correr a lo largo de la arena el lunes 9 de julio.

Taylor consideró que el perro solo estaba cansado por su aventura, y no lo pensó demasiado porque pronto O.G. parecía sentirse mejor.

Dos días después, el perrito dejó de comer, por lo que Taylor lo llevó rápidamente al veterinario, quien le dijo que el cerebro del can estaba hinchado y que no sobreviviría.

"Todavía se siente surrealista", dijo Taylor a Fox 13. "No se siente real. Tengo que controlar eso y darme cuenta de que es real y que se ha ido".

La ingestión de agua de mar puede tener consecuencias mortales tanto para los humanos como para los animales porque el cuerpo no está equipado para manejar el contenido de sal.

La veterinaria Melissa Webster le dijo a Fox 13 que los perros a veces confunden el agua del océano con agua dulce, por lo que los dueños deben vigilar de cerca a sus mascotas en la playa.

"Cuando traje a mi cachorro a la playa por primera vez, estuve literalmente allí por solo 10 minutos", dijo la Dra. Webster.

“Estaba bebiendo agua de mar como si fuera agua de la piscina. Entonces, para él, 10 minutos fue más que suficiente".

La Dra. Webster también les recordó a los dueños que se aseguren de que sus perros tengan suficiente agua fresca a mano para evitar que el perro recurra al agua de mar.

Taylor dijo: "A pesar de que teníamos agua fresca y él estaba bebiendo eso y tomábamos descansos, los accidentes todavía pueden suceder".

Él ha compartido su historia con la esperanza de evitar que otros propietarios experimenten la misma pérdida. Con el corazón roto habló del "espíritu vibrante" de O.G., diciendo:

"Si había una pelota de tenis y un palo en un gran cuerpo de agua, eso es lo que más le gustaba hacer".