Meghan Markle impresiona en vestido verde, mostrando su pancita en una última aparición en Fiji

El jueves por la mañana, el príncipe Harry y su esposa, la duquesa Meghan, llegaron a Nadi, al oeste de Fiji. Asistieron para presentarse en un evento especial en el aeropuerto de Nadi.

Para la ocasión, la duquesa eligió un impresionante vestido verde que evidenciaba su barriguita de bebé. El traje de tonos esmeralda fue creado por el diseñador canadiense y taiwanés Jason Wu.

El vestido, que le llegaba justo a las rodillas, se veía sencillo a primera vista, pero en realidad presentaba detalles plisados ​​en los hombros y mangas angulares. Ella complementó su look con unos sencillos pendientes de oro de Pippa Small en forma de hoja, y brazaletes a juego.

Pippa Small es una marca de moda que comenzó en Notting Hill en 2007. La marca abrió una concesión en Nueva York, en la ABC Carpet & Home.

En la primavera de 2015, los pendientes de hojas de oro se vendieron como parte de una colección. En sus pies, lucía unos tacones de aguja azul marinos de gamuza, pertenecientes a la marca Manolo Blahnik.

El príncipe Harry, de 34 años, optó por un traje gris claro y zapatos marrones. Después de una ceremonia de bienvenida oficial, la pareja develó una estatua para conmemorar al Sargento Talaisi Labalaba, quien fue un soldado británico-fiyiano, que murió heroicamente en la batalla.

Labalaba era un miembro de Fiji de la élite British Special Air Service (SAS). Hace cuarenta y seis años, él solo evitó que 250 atacantes tomaran una base militar.

En 1972, dio su vida tratando de defender a sus compañeros soldados en la Batalla de Mirbat, en lo que hoy es Yemen. A la ocasión especial también asistieron el presidente de Fiji, Jioji Konrote, altos representantes del gobierno y las Fuerzas Armadas.

En Nadi, Harry también bebió otro tazón ceremonial de kava, que es una bebida sin alcohol que tradicionalmente se sirve en eventos sociales. A pesar de que la hierba se usa para tratar la ansiedad, existen preocupaciones sobre su efecto en el hígado.

Incluso se prohibió que se importara a la Unión Europea desde el 2003. Cabe destacar que el príncipe bebió previamente la bebida en una ceremonia de bienvenida oficial en Albert Park.

Después de la celebración, la pareja real abordó un vuelo charter de Qantas para la nación de Tonga, en el Pacífico Sur. Este es el tercer país que visitarían durante su viaje de 16 días en nombre de la Reina.

A su llegada, Harry y Meghan, de 37 años, recibieron una bienvenida oficial de Su Alteza Real, la Princesa Angelika Latufuipeka, en el aeropuerto. Más adelante, serían los invitados de honor en otra recepción de bienvenida y cena en Nuku'alofa.

Aparentemente, asistirá el gobernante tongano, el rey Tupou VI, y su esposa, la reina Nanasipau'u. También habrá entretenimiento tradicional tongano.

Meghan no solo ha usado este tipo de verde para sus últimos eventos. Ella lució otro vestido del mismo tono el primer día de su gira por Australia, cuando llevó un vestido de estilo khaki maxi, del diseñador estadounidense Brandon Maxwell.

Ella se había cambiado de un lindo vestido blanco creado por la diseñadora australiana, Karen Gee.

DRAMA REAL TRAS ANUNCIO DEL BEBÉ

La semana pasada, varios medios indicaron que no todos estaban felices con el anuncio de embarazo de Markle.

Hay dos razones fundamentales por las que más de una persona no estuvo contenta de que Meghan, la esposa del príncipe Harry, anunciara que estaba embarazada justo estos días de octubre.

Este fue anunciado a la familia presuntamente el 12 de octubre, día de la boda de la Princesa, así como al mundo entero el 15 de octubre, el Día Internacional de la pérdida perinatal y gestacional.

A pesar de que se trata de dos figuras públicas que disponen de consejeros y que deben ser cautelosos sobre los pasos que dan y cómo los dan, es probable que tanto ellos como el palacio no estuvieran al tanto sobre qué se conmemora el 15 de octubre.

Su anuncio del lunes fue considerado insensible, pero otras personas se molestaron porque la pareja “quiso desviar” la atención de la princesa Eugenie en su boda, hacia ellos mismos, unos días antes.