Perro afligido espera más de 80 días en el lugar exacto donde murió su dueño
Siempre se ha dicho que los perros son los mejores amigos del hombre, y es que estos animales lo demuestran en cada oportunidad con cada acción noble que dedican a sus amos o a terceros.
En Hohhot, Mongolia Interior (norte de China), un perro ha cautivado a millones de seguidores de las redes sociales, tras pasar más de 80 días en una de las carreteras de la ciudad, en el mismo lugar donde su dueña pereció en un accidente vial el pasado 21 de agosto.
Según reseña Daily Mail, los lugareños han tratado de ayudar al perrito en varias ocasiones.
Le llevan agua y comida, pero este, que no confía en los extraños, rehúye de las personas que se le acercan.
El video de la mascota fiel ha sido reproducido más de 6 millones de veces en el sitio de medios sociales chino Sina Weibo y diariamente los usuarios, que se muestran preocupados, dejan comentarios de elogio para el noble animal:
"En ocasiones, los perros son más fieles que los humanos", manifestó un cibernauta del microblogging.
"Es tan peligroso que el perro se quede en el camino… Espero que alguien le dé a este pequeño chucho un nuevo hogar", señala otro usuario.
“¡Estoy llorando! Esto es tan conmovedor”, confesó un tercero.
“Ya han pasado casi tres meses. El perro siempre está ahí, llueva o truene. Es tan conmovedor", dijo el taxista Guo Xinhua, quien siempre pasa por el lugar, a China News.
Según el informe, la organización benéfica local Blue Hada se está acercando a la familia del dueño del perro, que ha sido comparado con Hachiko, el famoso perro Akita que esperaba a su dueño en la Estación Shibuya de Tokio todos los días en la década de 1920.
LA HISTORIA DE HACHIKO
Hachiko es un héroe nacional para los japoneses, tanto así que le construyeron una estatua de bronce junto a la estación de trenes por lo conmovedora que fue su historia.
Eizaburo Ueno, un profesor de ciencias agrícolas en la Universidad de Tokio, en Japón, siempre había querido un perro Akita japonés de raza pura.
Buscó al cachorro perfecto durante mucho tiempo, hasta que un día uno de sus estudiantes lo convenció de adoptar a Hachico.
Ambos congeniaron magníficamente y muy rápido y, cuando el canino creció un poco, acompañaba a su amo a la estación todas las mañanas, para que este partiera al trabajo.
En horas de la tarde, cuando Ueno ya estaba por regresar, Hachi, como le decían de cariño, ya estaba cerca de donde se estacionaba el tren donde venía su dueño.
El 21 de mayo de 1925, siguiendo la misma rutina, el perro fiel acompañó a su amo hasta la estación en horas de la mañana y regresó en la tarde, pero por algún motivo, el profesor no regresó.
Hachico se mantuvo en el lugar durante horas.
Ocurrió que repentinamente y sin ninguna explicación, Eizaburo Ueno sufrió un derrame cerebral que lo dejó sin vida en horas de trabajo.
Hachiko se mudó con un antiguo jardinero de la familia Ueno. Pero durante el resto de su vida de diez años, siguió yendo a la estación de tren de Shibuya todas las mañanas y tardes, precisamente cuando el tren debía entrar en la estación.
PERDIDO AL ESPERARLAS
Otra conmovedora historia de perros que esperan a sus amos, sin importar el tiempo que pase, es la de ‘Bentley’, un perrito dorado que estuvo 19 días perdido en las Montañas Rocosas de Colorado, después de que sus dueñas tuvieron un accidente y el salió por la ventana.
El canino, desorientado, se quedó merodeando por el lugar, esperando por sus dueñas, que cayeron 600 pies en una pendiente, el pasado 7 de agosto, luego de que su vehículo se deslizara por el borde de la carretera.
En el accidente, murió Jennifer Orr, de Kansas, pero su hija Samantha, de 21 años, quedó con vida.
Cuando la chica salió del hospital, regresó a buscar a su mascota, pero no estaba segura de si seguía vivo tras el terrible choque. No obstante, tenía esperanzas de encontratlo.
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