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La historia de amor de Don Ramón y La Bruja del 71 en la vida real triunfó sobre la muerte

Ella se enamoró de él no solo en la ficción sino también en la realidad. Pero aunque fue un amor no correspondido, hoy sus restos reposan a escasos centímetros el uno del otro.

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Dos de los personajes inolvidables de la célebre comedia mexicana “El Chavo del 8”, fueron sin duda Don Ramón y Doña Clotilde, ‘la Bruja del 71’, interpretados por Ramón Valdez y Angelines Fernández.

En la trama, la ‘bruja’ amaba a Don Ramón y según la historia publicada por Infobae, lo cortejaba a su modo: le cocinaba, lo ayudaba con los mandados, le hacía regalos, lo piropeaba, pero su amor nunca fue correspondido.

En la vida real, ambos artistas –que se conocían y trabajaron juntos en 1968, en la película Corona de lágrimas- se habían hecho grandes amigos.

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EllA ESTABA ENAMORADA EN LA VIDA REAL

Incluso, fue Valdés quien recomendó a a la actriz española al creador de “El Chavo”, Roberto Gómez Bolaños (Chespirito), quien la incorporó al elenco en 1972, un años después del estreno de la exitosa serie.

Según Infobae, Fernández no solo de enamoró del papá de ‘La Chilindrina’ en la ficción, sino también en la vida real. Sin embargo, en ambos casos fue una pasión no correspondida.

Angelines nunca habría confesado su amor a Valdés, quien se casó varias veces y tuvo diez hijos.

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Siete años más tarde, Valdés renunció a El chavo del 8 y ella continuó, pero sumida en la tristeza.Valdés sufría de un cáncer consecuencia de su adicción al tabaco, que se lo llevó en 1988.

El sepelio del popular actor fue multitudinario y Angelines estuvo allí, al igual que el resto del elenco.

SU DOLOR TRAS LA MUERTE DE RAMÓN VALDÉS

Cuenta la historia que la actriz se quedó por más de dos horas junto a la lápida de su amado en los Mausoleos del Ángel, al sur de Ciudad de México, llorando y lamentando su muerte: "Te fuiste, mi Roro", decía.

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Luego de deceso de ‘Don Ramón’, la icónica serie mexicana continuó al aire durante varios años, con una melancólica ‘Doña Cleo’ detrás de bambalinas, que como buena actriz escondía la tristeza y asumía su papel de ‘bruja’ con expresión huraña.

Entre otras cosas, Angelines y Ramón compartían su afición al cigarrillo, vicio que terminó llevándoselos a ambos a la tumba. Fernández también sufrió cáncer al pulmón y murió en 1994.

Pero antes de morir, la actriz nacida en 1922 habría pedido ser enterrada junto a Ramón Valdés, un deseo que le fue cumplido.

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Ahora, sus restos reposan uno al lado del otro, como en las historias de amor de las películas, a pesar de que mientras vivían nunca llegaron a ser una pareja.

El verdadero nombre de Angelines era María de los Ángeles Fernández Abad, quien había llegado a México en 1947, casi 25 años antes del estreno de El Chavo del 8, huyendo de la dictadura española de Francisco Franco.

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Era una mujer muy bella y con una fuerte personalidad, que se desempeñaba con soltura en los papeles dramáticos, y logró ingresar con éxito en el boom del cine mexicano de los 50 y 60, donde participó en distintas producciones con el famoso ‘Cantinflas’.

Recientemente publicamos un trabajo periodístico en el que mostramos imágenes de esa hermosa joven que hizo de México su segunda patria. En este enlace puede conocer más de su vida y admirar su esplendorosa belleza.

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