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Hombre heroico salvó valientemente a una niña de 11 años de ser secuestrada

Un buen hombre detuvo heróicamente el secuestro de una pequeña de 11 años en Queens, según los informes.

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Ningún día está completo sin una "buena acción del día". Fuentes policiales informaron a CBS2 que una niña de 11 años iba en camino a su clase alrededor de las 8 am del sábado por la mañana.

Un hombre de 40 años la estaba acechando a la distancia, se acercó a ella en su automóvil cerca de Center Street y Seneca Avenue en Ridgewood. El sospechoso, identificado como Relyn Estrada, la invitó a subirse en el auto.

La chica se negó y el hombre la persiguió cuatro cuadras. Después de llamar a la pequeña, el sospechoso bloqueó el camino de la niña usando su auto.

Ella peleó, pataleó, gritó, hizo todo y usó su teléfono. Ella salvó su propia vida, yo no. Hizo todo de la manera correcta, solo estaba allí para ayudarla"

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El sospechoso, supuestamente salió del vehículo y obligó a la puberta a sentarse en el asiento trasero. La niña comenzó a patear y gritar, mientras que Estrada trató de empujarla en la parte trasera de su Honda Civic.

El ruido llamó la atención de uno de los vecinos. Al oír los gritos de la niña, Alexander Salas decidió rescatarla y buscó un bate de béisbol. Salas le dijo al periódico:

"La agarró por la mochila y la derribó. Él tenía el bate sobre ella y la tenía derribada. Solo era estresante. (No había) de ninguna manera en el mundo, iba a dejar que se fuera”.

El hombre le proporcionó a la niña una ventana improvisada para escapar del carro. Estrada también sacó un bate de béisbol para seguir discutiendo con Alexander.

"Literalmente la tuvo de lado y ella estaba peleando con él, estaba tratando de ponerla en la cabeza del auto primero", dijo Salas. “Ella peleó, pataleó, gritó, hizo todo y usó su teléfono. Ella salvó su propia vida, yo no. Hizo todo de la manera correcta, solo estaba allí para ayudarla".

Fuente: YouTube / CBS New York

Fuente: YouTube / CBS New York

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Edwin González, de 59 años, escuchó los gritos y se unió a la conmoción. “¡Lo escuché gritar, dejar ir a la niña! ¡Suelta a la niña!”, recordó González.

"Saqué mi bastón. Esto es madera de roble y no se romperá en absoluto. Estábamos listos para llevarlo y hacer lo que teníamos que hacer para evitar que la niña fuera secuestrada."

Fue entonces cuando la esposa de Salas alertó a las autoridades, quienes llegaron a la escena inmediatamente y lograron arrestar a Estrada.

Estrada fue acusado de secuestro, encarcelamiento ilegal, peligro imprudente, posesión de armas, peligro para el bienestar de un niño, actuar de manera perjudicial para el niño y no informar el cambio de domicilio como delincuente sexual.

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El hombre ya tenía un registro de 13 arrestos previos por varios cargos, incluyendo abuso sexual. Presuntamente atacó a una mujer en el mismo vecindario en 2001.

El suceso causó conmoción en los medios. Fueron muchos los que opinaron en las redes sociales. Un usuario llamado Jessie De Santiago comentó que "Hay algo mal con el sistema judicial cuando alguien fue arrestada 13 y todavía está afuera siguiendo a niñas pequeñas."

La policía dice que la niña está de regreso en casa con su familia y no resultó herida durante el incidente.

Otra historia similar fue la de un hombre heroico que donó una parte de su hígado para salvar la vida de una niña con cáncer. La niña de 2 años pudo conocer al héroe que le dio el mejor regalo de todos: una segunda oportunidad.

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El doctor Armando Ganoza, le dijo a su familia luego de varias sesiones de quimioterapia que la única esperanza de la niña era recibir un trasplante.

Las quimioterapia no estaban surtiendo el efecto deseado ya que el tumor mantenía su malignidad. Nadie se esperaba que Joseph, el donante, se prestara para la donación ya que no conocía a la familia Smith.

Representó un gran alivio para el ‘UPMC Children’s Hospital’ la bondad del heroico hombre que decidió realizar la donación de una parte de su hígado para salvar la vida de la pequeña.

Gracias a tal hazaña, la pequeña de dos años podrá crecer teniendo una vida normal sin el mal del cáncer en su cuerpo.

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