Jimena Barón indignada por comentarios de que niña violada de 10 años pudo haber consentido
La actriz y cantante argentina se pronunció contra uno de los organizadores de la marcha contra el aborto legal efectuada el 23 de marzo en varias ciudades de la Argentina, luego de que este dio unas polémicas declaraciones sobre la violación de una menor de edad.
Al escuchar que Alejandro Geyer afirmó que una niña de 10 años violada pudo haber tenido sexo consensual, Jimena Barón explotó a través de su cuenta de Twitter, tildando al organizador provida hasta de sádico.
En una entrevista con TN, Geyer dio unas insólitas declaraciones durante la marcha contra el aborto legal que se llevó adelante el sábado pasado en varios puntos del país.
Además de impactar a Barón, las palabras del activista también sorprendieron a la periodista de TN, Valeria Sampedro, quien debió preguntarle más a fondo para aclarar la desconcertante situación.
De esta manera transcurrió el diálogo entre Geyer y Sampedro, en medio de la marcha provida.
Valeria Sampedro: “Una nena de diez años es menor de edad y si está embarazada es porque fue víctima de una violación. Estamos de acuerdo, ¿no?”
Alejandro Geyer: “¿Y si no fuera víctima de violación?”
Sampedro: “¿Quiso tener sexo con el abuelo, con el abuelastro?”
Geyer: “Pongamos”.
Sampedro: “¡¿Si?!”
Geyer: “Pongamos, no sé”.
Sampedro: “¿Eso es defender la vida de la nena?”
Geyer: “Puede haber un caso...”
Sampedro: “¿Ustedes de verdad creen que, a una nena de diez años, en la circunstancia que estamos describiendo, de público conocimiento, eventualmente le cabe la sospecha de haber querido tener relaciones sexuales con su abuelastro?”
Geyer: “No, no estoy diciendo eso, me está llevando a un campo... no tiene nada que ver”.
Sampedro: “Pregunto: ¿Qué hacemos con la vida de la nena?”
Geyer: “Necesita todo el apoyo, todas las ayudas necesarias para que pueda llevar adelanta su vida y la del niño gestante”.
Sampedro: “O sea, que lleve adelante el embarazo”.
Geyer: “Sí”.
Claramente, estas declaraciones despertaron indignación extrema en miles de mujeres, entre ellas, Jimena Barón, quien acudió a Twitter para expresar la molestia contra Geyer, llegándolo incluso a insultar.
“Qué BARBARIDAD! no hay palabras. Haciéndose el defensor de la vida opinando así sobre una nena de 10 años violada por un familiar. UN ASCO de persona, sádico e HIPÓCRITA”, escribió en su cuenta de Twitter.
Sampedro compartió el fragmento de la entrevista con sus seguidores de redes sociales, video que no tardó en volverse viral y recibir miles de respuestas en contra del organizador de "la marcha por la vida".
Míralo, a continuación:
Una usuaria escribió: “¡Suena pedófilo, incestuoso, aberrante por donde se lo escuche! No entiendo cómo pueden pensar que una nena de 10 años... ¡que asco! ¡Viejo degenerado!”
Otra enunció: ”Son pedófilos. Así logran violar niños. Cualquier excusa les viene bien”.
Asimismo, un hombre alegó: “Una menor de 10 años no tiene potestad ni capacidad para decidir o consentir relaciones sexuales; una persona mayor, si toca con fines sexuales a una menor, es violación... No hay vuelta que darle...”
Una internauta incluso tuvo un momento de revelación: “Yo defiendo la vida, pero lo que dijo este tipo es aberrante. No entra en mi cabeza, me repugna, me da asco y defiendo la vida, sí. Pero estoy a favor del aborto en casos de abusos, y escuchar gente como este tipo me hace dudar d mi creencia”.
¿Cuál es tu postura en este caso? ¿Te identificas con la reacción de Jimena y de estos varios internautas?
EL CASO DE LA NIÑA VIOLADA POR SU ABUELASTRO
El pasado 29 de enero, una niña tucumana de 11 años llegó junto con su madre al hospital Eva Perón de Tucumán, diciendo que tenía dolor de estómago, pero, en realidad, tenía un embarazo de 19 semanas. Ella había resultado embarazada de una violación por parte de la pareja de su abuela.
Entonces, madre e hija solicitaron a las autoridades una Interrupción Legal del Embarazo (ILE), un procedimiento legal en Argentina desde 1921 en casos de violación o cuando existe peligro para la madre.
Las autoridades relevantes dieron largas al asunto, y eventualmente, la niña fue obligada a someterse a una cesárea para dar a luz a un bebé que pesó apenas 660 gramos, a sus 23 semanas de gestación.
Luego de unos días de sufrimiento innecesario, el hijo prematuro con posibilidades de supervivencia mínimas falleció. Puedes leer más de cómo se manejó este caso de abuso y de parto prematuro, haciendo clic aquí.