Zelda, la hija de Robin Williams, heredó su talento pero tiene su propio estilo

La hija de Robin Williams ahora es una mujer adulta y sigue los pasos de su padre en la actuación y el altruismo.

Zelda Rae Williams, quien pronto cumplirá 30 años en julio, fue concebida en un momento en que la consola NES (Nintendo Entertainment System) estaba en boga.

Su padre era un confeso admirador de "Las leyendas de Zelda" y es por eso que su hija lleva el nombre de la princesa de la historia. Han pasado casi 5 años desde la muerte de su padre, quien murió el 11 de agosto de 2014 en su casa en Los Ángeles después de varios meses de luchar contra una grave depresión.

LA DETERMINACIÓN DE ZELDA

Esta tragedia tuvo un profundo impacto en la vida de Zelda, ya que nadie en el mundo podría haber imaginado que uno de los actores más brillantes de los últimos tiempos, que hizo de la comedia un arte, se suicidara en la soledad de su hogar.

Por esta razón, la hija del actor decidió dedicarse a crear conciencia sobre la salud mental y la devastación que la depresión puede causar en la vida de una persona. Pero además de su trabajo humanitario, la hija del aclamado comediante también tiene una exitosa carrera como actriz.

Aunque Zelda claramente ha heredado el talento de su padre, también se ha destacado por su identidad y su propio estilo. La joven actualmente interpreta la voz del personaje que lleva su nombre, pero no se ve a sí misma haciendo una comedia de pie como su padre.

SIGUIENDO LOS PASOS DE SU PADRE

Su papel más reciente fue para la exitosa serie de televisión "Criminal Minds", en la que presumió con una brillante actuación. Si no quieres perder la oportunidad de ver a Zelda interpretando el papel de un líder, tienes que ver el episodio 13 de la temporada 9 de la serie.

El hijo mayor de Robin, Zachary Williams, también ha ganado una reputación mundial por su trabajo humanitario dentro de la Penitenciaría Estatal de San Quintín, donde junto a uno de los internos se dedica a enseñar finanzas a la población penitenciaria.

El trabajo de Zach ha tenido un impacto positivo en la vida de todos los presos con los que ha trabajado y su programa es el más solicitado de toda la penitenciaría. Según él, saber sobre finanzas podría hacer que los reclusos formen su propio negocio legal y de esa manera se alejarían del crimen.