Letizia y Doña Sofía: contraste entre sus estilos de crianza

Doña Sofía y la Reina Letizia son mujeres muy diferentes, y ya en el pasado han llegado a tener asperezas debido a la forma de criar a los niños.

La Reina Letizia, como cualquier miembro de la familia real española, está constantemente bajo una lupa. El público cuestiona cada elemento de su vida, pero sobre todo, cuestionan la forma en la que cría a sus hijas, las infantas Leonor y Sofía. Tachada de perfeccionista, la Reina es considerada una mujer exigente, y suele ser blanco de críticas por ello.

Por su parte, la Reina Sofía es uno de los miembros de la casa real más queridos por el público, en su papel de abuela dadivosa y conciliadora. Sin embargo, no es lo mismo criar a un hijo que a un nieto. ¿Son realmente tan distintos los estilos de crianza de Letizia y Sofía?

En su tiempo liderando el palacio de Zarzuela, la Reina Sofía siempre estaba al tanto de todo lo que sucedía con sus hijos, y se aseguró de que un ayudante escoltara a su hijo Felipe en todo momento en que no estuviera en el palacio.

"Quería tener un elemento de contacto y observación próximo en la zona, pero sin interferir en la organización de los programas ni inmiscuirse en los detalles de ejecución", explica el tutor de la época de Felipe, José Antonio Alcina.

El interés por las vidas de sus hijos de Sofía es comparable con el de Letizia ahora. Toda decisión que los afectara tenía que pasar por ella, y a pesar de que se preocupaba por no parecer controladora, no toleraba que retaran su autoridad al respecto.

Por ejemplo, cuando Felipe fue de campamento a los 11 años, a su equpo de seguridad no le agradó la propuesta de que durmiera con los demás niños en tiendas de campaña alrededor de una hoguera improvisada, por lo que cancelaron la actividad, según cuenta Alcina. El príncipe apeló a su madre por teléfono, y ella se molestó mucho porque hubiesen tomado esa decisión por ella (aunque no la revocó).

En cuando a corrección de conducta, la Reina Sofía favorecía el "premio y el castigo", como le confesó a Pilar Urbano en entrevista.

"Los eduqué con ese criterio. Castigos leves, pero que les fastidiasen un poquito: 'Anda, vete al cuarto de baño y piensas un rato, hasta que te arrepientas de lo que has dicho; entonces, vienes y pides perdón' o 'Tú este sábado te quedas haciendo los deberes y no ves la película', o 'La merienda con tus amigos queda suspendida, avísales y diles que por tu culpa no pueden venir porque estás castigado."

El Rey Juan Carlos era el más permisivo. Cuando la Reina se negó a permitir que fueran por primera vez a una discoteca, fue Juan Carlos quien le insistió: "Sofi, déjales ir. No les va a pasar nada", hasta que Sofía cedió.

Sofía además consentía muchísimo al joven Felipe, frecuentemente permitiendo que se salieran con la suya en todo. Cuando Alcina conoció a Felipe a los 10 años de edad, su padre lo instó a saludarlo, lo cual el príncipe hizo sin mayor atención antes de salir corriendo rápidamente.

Inmediatamente, Sofía salió al paso para excusar la conducta del futuro rey, diciendo a Alcina: "Perdónelo, pero debe de venir hambriento del colegio".

No sería la última vez que permitiría a Felipe hacer de las suyas sin mayor consecuencia. A los 13 años, en una fiesta nupcial de un pariente en Hannover, Felipe apareció de repente con una enorme jarra de cerveza en la mano.

"Al estar presente la reina, decidimos no meternos en donde no nos llamaban. Doña Sofía no dio importancia al hecho, con lo que nos quedamos más tranquilos", contó el tutor.

Ahora como abuela, Sofía ha tenido oportunidad de reflexionar sobre su rol de madre.

"[A los nietos] quizás les consiento mucho más que a mis hijos de pequeños. Pero eso lo hacemos todas las abuelas del mundo. Tampoco consentirles mucho, aunque una como abuela pueda permitirse darles unos mimos que no les dabas a tus hijos. Con los hijos vives como una segunda vida, aunque te preocupan mucho porque quieres que todo lo hagan bien, y estás tan encima, que no te relajas."

Los escándalos dentro de las familias reales europeas por enemistades internas nunca paran. Pero la verdad es que la Reina Letizia más allá de presenciar los desplantes de Kate Middelton hacia su suegra, también tiene desaires para la suya. Su relación con Doña Sofía empeora.

En estas vacaciones de verano, los Felipe VI y Letizia no estarán en la residencia oficial que los monarcas españoles tienen para la temporada. De acuerdo con la revista Lecturas, se quedarán en Son Vent, en Palma de Mallorca. Esta es la residencia que fue construida para Felipe cuando aún tenía el título de Príncipe de Asturias.

Esto se da en medio de comentarios que recalcan que a la luz pública, Doña Sofía y su nuera, la Reina Letizia, salen de paseos juntas y han sido fotografiadas en eventos, pero es sabido que en privado ambas se mantienen lo más alejadas posibles para evitar mayores roces y conflictos.