Conoce a Edward de Wessex, el hijo menor de la reina Elizabeth que creció "solo y desplazado"

De los cuatro hijos de la reina Elizabeth II y el príncipe Philip, solo el príncipe Edward ha logrado mantener una vida fuera del foco de la prensa.

El Príncipe Edward, no solo es el duodécimo en la línea de sucesión al trono. También es uno de los hijos menos conocidos de la reina. El hijo menor de Elizabeth ha quedado en un segundo plano frente a la popularidad de sus hermanos y sus sobrinos.

El Conde cumplió 57 años el pasado 10 de febrero, y según una anécdota de su vida reseñada por Vanity Fair, en algún momento su madre llegó a olvidar su cumpleaños.

EL CONDE DE WESSEX

Edward Anthony Richard Louis es el cuarto y último hijo del matrimonio de la monarca y el príncipe Philip. Los hermanos de Edward son el príncipe Charles, la princesa Anne y el príncipe Andrew.

Se casó con Sophie Rhys-Jones el 19 de junio de 1999, en la Capilla de San Jorge en el Castillo de Windsor. En la actualidad, tienen dos hijos: Lady Louise Windsor y James, Vizconde Severn.

Ha gozado de todas las comodidades y lujos que envuelven a la familia, pero nunca ha obtenido tanta popularidad o atención como sus hermanos. Hace solo un día, el Conde celebró sus 57 años.

Parece que no solo ha obtenido poca atención de los medios, sino también de su progenitora. Según la biógrafa oficial del Príncipe, Ingrid Seward, Edward creció sintiéndose “solo y desplazado”.

En 'Paxman On The Queen’s Children', el documental que recoge la vida privada de la familia real británica, Seward aseguró que el menor del matrimonio no obtuvo la misma atención de sus padres.

Este detalle se reflejó un día cuando la Reina se sentó a desayunar con el Conde de Wessex sin recordar que, justo ese día, celebraba su cumpleaños.

Aunque es uno de los menos nombrados, también es el único hijo de la Reina que puede presumir de no haber pasado por el divorcio durante su vida amorosa. Todo lo contrario a sus hermanos.

El príncipe Edward y su esposa fueron vistos en un evento de carreras, y las fotos demostraron cuánto amor hay en su relación tras 20 años de matrimonio.

AHORA CON MÁS RESPONSABILIDADES REALES

Edward ha asumido un papel más activo en la casa real, luego de la jubilación de su padre. Antes solía ​​servir en los marines y tuvo una temporada como productor de televisión.

Por su parte, su esposa Sophie ha mantenido un perfil relativamente bajo. Ella es la segunda hija de Christopher Bournes Rhys-Jones, un vendedor jubilado, y la fallecida Mary Rhys-Jones, una secretaria.

A diferencia de otras bodas reales, la boda de Edward y Sophie no fue televisada y no tuvo participación ceremonial o militar. El día de la ceremonia, ella se veía impresionante con un vestido de organza de seda Samantha Shaw adornado con 235.000 cristales y perlas.

También llevaba una tiara que provenía de la colección privada de la Reina, compuesta por cuatro motivos de volutas abiertas. La tiara fue diseñada y remodelada por el entonces Joyero de la Corona, David Thomas de Asprey y Garrard.

La Reina confirió los títulos del Conde de Wessex y Vizconde Severn al príncipe Edward. En efecto, Sophie se hizo conocida como Su Alteza Real La Condesa de Wessex. En Escocia, la pareja era conocida como el conde y la condesa de Forfar, títulos que les fueron conferidos en marzo de 2019.

DOS DÉCADAS DE MATRIMONIO

Edward y Sophie encantaron a sus seguidores durante la celebración de su aniversario número 20, el 19 de junio de 2019. La pareja fue vista en un evento de carreras, y sus fotos mostraron cuánto se aman.

También se vio en el evento a Camilla Parker Bowles, duquesa de Cornualles, con su esposo, el príncipe Charles.

Un caso contrario al de la vida de Edward de Wessex fue el protagonismo que tuvo la tía de la reina Elizabeth.

La princesa Mary fue la tercera y la única mujer entre los seis hijos del rey George V y Mary de Teck. También fue una de esas grandes damas que destacan en todo a su paso y redefinió el papel de princesa.

La princesa Mary se caracterizó por romper todos los moldes de lo que se esperaba de ella. Siempre se mantuvo alejada de la polémica, pero destacó en cada paso de su vida. Incluso se formó en enfermería y fue la primera mujer en ser general honoraria del ejército británico.

Nunca antes una princesa había roto tantos paradigmas como ella. Cualquier película de ficción se queda corta ante la voluntad con la que encaró su vida y se enfrentó a todas sus pasiones.