Iñaki Urdangarin regresa a su voluntariado en el centro Don Orione

El cuñado del rey Felipe VI ha vuelto a salir de la cárcel tras estar tres meses sin gozar de los permisos que había obtenido desde hace un año.

Iñaki Urdangarin se encuentra recluido en prisión desde hace dos años, purgando la condena por el caso Nóos. Desde entonces, logró salir dos veces para reunirse con su familia y lleva algún tiempo realizando voluntariado en el Hogar Don Orione.

El estado de alarma decretado por la pandemia de coronavirus a mediados de marzo afectó la dinámica penitenciaria en España y los presos tuvieron una doble reclusión. Ellos no solo están en prisión sino que debieron respetar el confinamiento obligatorio.

Los presos no podían recibir visitas de sus familiares y aquellos que gozaban de permisos, como el esposo de la infanta Cristina, no pudieron salir más de los reclusorios.

De hecho, el voluntariado en el Hogar Don Orione también quedó suspendido por tratarse de población de la tercera edad, una de las más vulnerables al virus. Sin embargo, las medidas de seguridad contra el covid-19 se han ido relajando poco a poco en el país y la ciudadanía empieza a recuperar la normalidad.

Por eso, Iñaki Urdangarín ha sido visto regresando a su labor de voluntariado en el centro de ancianos. Los medios captaron la que sería su segunda salida del centro penitenciario.

En esta ocasión, el esposo de la infanta Cristina se veía tranquilo y con un aspecto relajado. A través del tapabocas se podía ver que no ha afeitado su barba y llevaba una camiseta blanca.

Por ahora, el cuñado del rey ha decidido aplazar las salidas con su familia y retomar su labor de voluntariado. Sin embargo, se espera que dentro de poco retome el contacto con su esposa, sus hijos, su madre y sus hermanos en Vitoria.

La última visita que recibió el exjugador de balonmano a mediados de marzo fue la de su cuñada, la infanta Elena. Sin embargo, las penitenciarias también empiezan a recuperar este beneficio para sus presos. Las visitas se hacen a través de la mampara, con guantes y tapabocas.

Cabe anotar que durante la cuarentena, Urdangarin debió conformarse en las frías noches de soledad en Brieva con escuchar la voz de sus familiares por teléfono. Además, se perdió varios acontecimientos importantes.

Recientemente, su hijo Miguel cumplió la mayoría de edad y su hija Irene celebró sus 15 años en Ginebra, Suiza, donde vive con su madre y sus hermanos. Además, también estuvo ausente del cumpleaños número 55 de la infanta Cristina.