La historia de la mujer que cuidó a su madre por nueve años y jamás le dijo quién era
La enfermera escribió un libro sobre la experiencia con su madre, quien la entregó a un orfanato cuando era apenas una bebé.
Hay historias de la vida real más impactantes que la ficción y la de Phyllis Whitsell es un excelente ejemplo. La mujer de 65 años de edad creció como huérfana, pero nunca renunció a su objetivo de encontrar a su madre biológica.
CRECIÓ PENSANDO QUE SUS PADRES ESTABAN MUERTOS
Phyllis vivió hasta los cuatro años de edad en el orfanato de monjas ubicado en Birmingham, en Coleshill, donde la dejó su madre cuando era solo una bebé.
Fue adoptada por una familia que le dio una calidad de vida que le permitió crecer como una chica feliz y cursar estudios universitarios. Sin embargo, siempre le contaron que sus padres biológicos estaban muertos.
SER MADRE LA IMPULSÓ AÚN MÁS
A pesar de la realidad que le plantearon, Whitsell siempre supo que no estaba sola. Eventualmente se convirtió en enfermera, contrajo matrimonio y se embarazó de su primer hijo, lo cual la impulsó a emprender la búsqueda de su madre biológica.
Sin dudarlo, volvió al orfanato y descubrió que su mamá se llamaba Bridget Mary Larkin, mejor conocida como "la loca vieja Mary", y que era una mujer alcohólica que llevaba una vida llena de tormento.
DESCUBRIÓ LA VERDAD
A medida que profundizaba en la investigación, Phyllis descubrió que su mamá había huido de casa tras ser abusada por el hermano mayor. Estas circunstancias conllevaron a que cayera en el alcoholismo, y a que se consideraba incapaz de criar a una niña.
Con esta información en sus manos y con la ayuda de la policía local, la enfermera pudo ubicar a la anciana que vivía en condiciones deplorables en un barrio de Birmingham.
SOLO QUERÍA CONOCERLA
"Si me hubieran dicho que era una asesina en masa, no la hubiera rechazado. Estaba tan decidida a conocerla. Pensé: ‘Esta es mi madre, voy a encontrarme con ella en cualquier caso’", dijo Phyllis según informó Mirror.
Luego de dar a luz a su primer hijo, la enfermera fue a casa de su madre, quien era conocida por su mal carácter. Sin embargo, cuando vio a su hija actuó de manera pacífica, aún sin conocer el parentesco entre ambas.
EL EMOCIONANTE ENCUENTRO
Dado que Phyllis acudió al encuentro uniformada como enfermera, la anciana se sintió en confianza y comenzó a hablar de una hija que había dado en adopción. Emocionada porque sabía que se refería a ella, le prometió que volvería... Y así lo hizo.
"Prometí volver a verla, y cuando me iba, me acerqué y quitó un mechón de cabello de mis ojos de una manera tan tierna, como una madre le haría a su hijo. Quería decir: ‘¡Estoy aquí, mamá! Soy yo’, pero algo me detuvo", recordó Phyllis.
LA CUIDÓ POR NUEVE AÑOS
Desde ese momento, la mujer estuvo visitando a su madre todas las semanas, durante nueve años, sin decirle que en realidad era su hija. Cuando finalmente lo hizo, la demencia de Bridget ya estaba tan avanzada, que no reaccionó a la noticia.
Sin embargo, la enfermera y autora del libro 'Finding Tipperary Mary' cuidó de ella hasta que falleció, sin reprocharle jamás haberla dado en adopción.