"Te quiero siempre": las últimas llamadas de víctimas del 11-S que reconfortan a sus familias

Aunque han pasado dos décadas desde aquella tragedia, las historias individuales que surgieron de aquel fatídico día siguen siendo desgarradoras y muy emotivas.

Hoy se cumple el vigésimo aniversario del ataque terrorista del 11 de septiembre de 2001. El mundo ya comienza a recordar los terribles acontecimientos de aquel fatídico día.

Hace veinte años, cuatro aviones volaron contra las Torres Gemelas del World Trade Center, el Pentágono y Pensilvania. Hoy en día, este sigue siendo uno de los eventos más impactantes que se recuerden. Más detalles abajo.

VALIENTES Y DESGARRADORAS HISTORIAS

Fueron 2.996 personas las que perdieron la vida en esta tragedia, incluyendo a las 265 que se encontraban a bordo de los cuatro aviones. Unas 25.000 más resultaron heridas durante los acontecimientos.

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Aunque han pasado veinte años, las historias individuales surgidas de ese día siguen siendo desgarradoras, valientes y muy conmovedoras.

AGRADECIMIENTO DE UNA ESPOSA

Brian Sweeney viajaba en el vuelo 175 de United Airlines. Este fue el avión que se estrelló contra la Torre Sur del complejo.

Él llamó a su esposa Julie desde la aeronave tras ser secuestrada, unos tres minutos antes de que chocara contra el World Trade Center. Esto fue lo último que le dijo a su amada:

“Jules, es Brian. Estoy en un avión que fue secuestrado. Si las cosas no van bien, y no se ven bien, quiero que sepas que te amo. Quiero que hagas el bien, que la pases bien. Igual con mis padres y todos. Te amo siempre. Adiós, cariño”, dijo el hombre.

La mujer explicó más tarde que su esposo era piloto de la Marina y que había servido en la primera Guerra del Golfo. Ella cree que él habría intentado hacer algo con respecto al ataque cuando estaba en el avión.

Contó que Brian era un guerrero. No creía que algo como eso pudiera llevárselo. “Todo lo que necesitaba era ese mensaje. Creo que lo dejó cuando supo que no volvería a casa”, dijo Jules, según reseñó Metro UK.

Ella está muy agradecida por las palabras que le dejó su esposo, porque al menos pudo conocer lo que estaba pensando. Su voz le hizo sentir tranquilidad.

PALABRAS PARA SU MADRE

Melissa Doi fue otra de las víctimas del ataque terrorista. Ella trabajaba en el piso 83 de la Torre Sur. Era gerente en IQ Financial Systems. Aspiraba a convertirse en bailarina de ballet y se había graduado de la Universidad Northwestern en Illinois.

Unos quince minutos después de que la torre fuera atacada por el vuelo 175 a las 9:03 de la mañana, ella llamó al 911. Era el mismo vuelo en el que estaba Brian. La mujer había quedado atrapada en el piso donde laboraba junto a otras cinco personas.

“Bueno, todavía no hay nadie aquí, y el piso está completamente sumergido. Estamos en el suelo y no podemos respirar. Y hace mucho, mucho, mucho calor”, dijo la mujer al operador cuando este le contestó, según reseñó Metro UK.

Él hizo lo posible por mantenerla calmada. Le explicó que los servicios de emergencia ya estaban al tanto de lo que ocurría y que ya iban en camino para tratar de rescatarlos.

Melissa manifestó que todos en el piso tenían dificultades para respirar, algunos más que otros. Mientras la torre continuaba ardiendo a su alrededor, ella le preguntó al operador si se podía quedar en línea acompañándola.

Ella sentía que estaba en sus últimos momentos. Por motivos de privacidad, solo se publicaron los primeros cuatro minutos de los 24 que había durado la llamada.

Cerca del final del audio, la mujer le había solicitado al operador que programara una llamada a tres bandas con su madre para hablarle por última vez. Lamentablemente el operador no pudo comunicarla con su madre, pues no contaban con ese sistema.

Poco antes de que la llamada se cortara, le pidió al operador que le enviara un mensaje a su mamá, Evelyn Alderete. Esa noche, el hombre llamó a la madre de Melissa y le leyó el mensaje: “Dile a mi mamá que la amo y que es la mejor mamá del mundo”.

MENSAJE A SU AMOR Y A SUS HIJOS

Los pasajeros de otro de los aviones, el vuelo 93 de United Airlines, lograron dominar a los secuestradores mientras volaba hacia Washington.

Sin embargo, terminó estrellándose contra un campo cerca de Shanksville, Pensilvania. Todas las personas a bordo perdieron la vida. Una de las azafatas, CeeCee Lyles trató de llamar a su esposo dos veces desde el avión.

La madre de cuatro estaba entre la valiente tripulación y los pasajeros que dominaron a los secuestradores. Lamentablemente su esposo, oficial de policía, acababa de salir de un turno de noche y no escuchó el timbre del teléfono.

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Todo lo que le quedó de su heroica esposa fue un mensaje de voz devastador. Lo primero que hizo ella fue decirle que estaba en el avión y que había sido secuestrado.

“Quiero decirte que te amo. Por favor, dile a mis hijos que los amo y que lo siento. No sé qué decir. Hay tres tipos, secuestraron el avión. Escuché que unos aviones volaron hacia el World Trade Center. Espero volver a verte, cariño. Te amo”, dijo CeeCee en su mensaje.

Además de estas grabaciones, otras 1.600 han sido publicadas en los años posteriores al ataque.