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Farrah Fawcett volvió con Ryan O'Neal enfermo y a ella también le dio cáncer: él la cuidó hasta el final

Georgimar Coronil
26 oct 2021
09:40

En junio de 2009, el mundo perdió a Farrah Fawcett a causa del cáncer. Antes de morir se había reencontrado con su amor de siempre, Ryan O'Neal. Diagnosticada unos años antes, Fawcett luchó ferozmente contra su cáncer.

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Tan solo tres años después de su fallecimiento a Ryan se le diagnosticó un cáncer de próstata en fase 4. Esta no sería su primera batalla contra la enfermedad, ya que en el pasado había tenido leucemia.

Años después de la muerte de Farrah, O'Neal la sigue echando de menos y recordando su tiempo juntos. Su historia de amor era única y estaban dispuestos a luchar por ella.

Farrah Fawcett y Ryan O'Neal el 10 de abril de 2003 en Los Ángeles. | Foto: Getty Images

Farrah Fawcett y Ryan O'Neal el 10 de abril de 2003 en Los Ángeles. | Foto: Getty Images

SOBRE FARRAH FAWCETT

Nacida en 1947 en Texas, Farrah siempre fue considerada como una de las chicas más bellas de su escuela. En la Universidad de Texas, empezó a estudiar microbiología antes de cambiar de curso y especializarse en Artes.

Al ser tan atractiva, los agentes de talento la buscaron muy pronto. Pero no se trasladó a Hollywood, para probar suerte en la industria del entretenimiento, sino hasta 1968.

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A los 21 años, ya había firmado un contrato de 350 dólares a la semana y empezó a aparecer en anuncios. De allí pasó al cine, y rápidamente obtuvo muchos pequeños papeles en televisión.

Poco después, conoció al actor Lee Majors, con quien se casó el 28 de julio de 1973. En 1979, la pareja se separó. Su divorcio fue definitivo el 16 de febrero de 1982.

Conmovido por su gracia y vivacidad, el productor Aaron Spelling la contrató como una de las tres agentes de la serie "Charlie’s Angels". Actuó junto a Kate Jackson y Jaclyn Smith.

Farrah se convirtió en la heroína de la serie e incluso ganó un premio People's Choice como intérprete favorita en un nuevo programa de televisión. Los fans la adoraban tanto que su peinado se volvió tendencia, hasta bien entrada la década de los 80.

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A los 50 años, conmocionó a los seguidores cuando apareció en el número de julio de 1997 de Playboy. Este se convirtió en el más vendido de la revista para la época.

En 2006 se le diagnosticó un cáncer anal. En 2007, los médicos le comunicaron que estaba en completa remisión tras haberle extraído el tumor.

Sin embargo, su alegría duró poco, ya que apenas unos meses después, su cáncer, entonces en fase 4, hizo metástasis en el hígado. A pesar del terrible diagnóstico, Farrah mantuvo su actitud de luchadora. Estuvo dispuesta a probar cualquier cosa que pudiera curarla.

Por desgracia, aparecieron nuevos tumores que hicieron que su salud se deteriorara rápidamente hasta el punto de tener que ser hospitalizada. Pasó sus últimos días en cama descansando y recibiendo visitas de amigos cercanos.

Finalmente, perdió la batalla contra el cáncer el 25 de junio de 2009. Antes de morir, hizo un documental llamado "Farrah's Story".

El mismo muestra cómo enfrentó el cáncer y sus tratamientos. Otro documental que salió a la luz acerca de su vida se llamó: "Farrah Fawcett Forever". También creó una fundación con su propio nombre para luchar contra esta enfermedad.

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SOBRE RYAN O'NEAL

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La legendaria estrella de Hollywood es hijo de una pareja que también se dedicaba a la industria del entretenimiento. Su padre fue guionista y madre actriz.

Empezó a actuar en 1960, pero se hizo popular tras aparecer en la serie de televisión "Peyton Place". Alcanzó la fama internacional cuando protagonizó la película de 1970 "Love Story".

Hizo una serie de apariciones en la gran pantalla e incluso actuó junto a su hija Tatum en la película "Paper Moon". Con este film, la chica hizo historia. A los 10 años, se convirtió en la persona más joven en ganar un Oscar.

A principios de los años 70, O'Neal estaba en la cima de su carrera. Fue elegido como la segunda estrella más popular de Estados Unidos, después de Clint Eastwood.

En 1975, recibió el premio Harvard Lampoon al peor actor del año por su papel en "Barry Lyndon". Su carrera nunca se recuperó de la desigual acogida de esta película.

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FAWCETT Y O'NEAL

Mientras estaba de viaje, Lee Majors había pedido a su amigo O'Neal que llevara a su esposa, Fawcett, a cenar. O'Neal vio esta petición como algo extraño.

Antes, la pareja le había revelado a Ryan que su matrimonio había terminado, aunque él pensaba que se veían muy bien juntos.

En lugar de invitarla a cenar, el famoso la llevó a un concierto. Tras esto, Majors ya no estaba de acuerdo con la salida e incluso empezó a llamar a O'Neal para que se alejara de su mujer. Durante muchos años, Fawcett mantuvo una relación amorosa con O'Neal, tras su divorcio de Majors.

Fueron inseparables como amigos y amantes durante más de 30 años. Juntos, los tuvieron un hijo, Redmond, en 1985. La parea fue sincera sobre su relación desde un principio, revelando que aunque la unión matrimonial no era para ellos, no se separarían.

Sin embargo, terminaron su relación en 1998, luego de que Farrah sorprendiera a Ryan siendo infiel. Volvieron a estar juntos en 2001 luego de que a él se le diagnosticara leucemia. Con el tiempo el actor mejoró, ya que su enfermedad no ponía en peligro su vida.

Ryan O'Neal, su hijo Redmond y Farrah Fawcett al recibir su estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood. | Foto: Getty Images

Ryan O'Neal, su hijo Redmond y Farrah Fawcett al recibir su estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood. | Foto: Getty Images

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Cuando a Fawcett también se le diagnosticó un cáncer, O'Neal permaneció a su lado hasta el último segundo. Según amigos cercanos, incluso le propuso matrimonio mientras estaba en el hospital, ella aceptó, pero, por desgracia, no tuvieron tiempo.

Cuando el sacerdote del hospital St. John's llegó para reunirse con ellos, ya era demasiado tarde y le dio la extremaunción. En sus últimos minutos él sostenía sus manos.

En 2011, el famoso reveló que se sorprendió cuando los médicos le dijeron que tenía un cáncer de próstata en fase 4. Sin embargo, se siente afortunado de que se lo hubieran detectado a tiempo.

Años después de la muerte de Farrah, dijo que no había un día en el que no la quisiera. Tenían un profundo amor y un vínculo mutuo. O'Neal calificó de larga y valiente la lucha de su amor por vivir.

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