Los 6 hijos de Paul Newman fueron aplastados por la fama de su padre y sufrieron la atención no buscada de sus fans

La megaestrella Paul Newman obtuvo una gran fama durante sus días de gloria en el mundo del espectáculo. Pero todo ello tuvo un alto precio que sus seis hijos tuvieron que pagar.

Paul odiaba toda la atención que atrajo gracias a su estatus de celebridad. Sus hijos la odiaban aún más. El actor era evasivo con los periodistas y no le gustaba dar autógrafos.

Lo que más le molestaba, era la insinuación de que su éxito como estrella de cine se debía a sus ojos azules. Era un atributo que llamaba la atención de forma indeseada y no tenía nada que ver con sus habilidades interpretativas.

NO SE DEJÓ INTIMIDAR POR LA FAMA

El artista anhelaba pasear por las calles sin ser fácilmente localizado, una vez creyó encontrar la solución dejándose crecer la barba.

Sin embargo, su plan fracasó cuando hasta los niños pudieron darse cuenta de que era él. Paul era vulnerable a ser acosado en público, y cuando llevaba a su familia a Disneyland, tenían que salir por la puerta trasera.

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EL IMPACTO DEL ESTRELLATO

Dicho esto, el efecto de la fama de Paul en sus hijos fue abrumador. Tenía tres hijos de su primer matrimonio con Jackie Witte, y otros tres con su segunda esposa, Joanne Woodward, quien dijo en una ocasión:

"Cuando los niños van a cualquier sitio con él, pueden ser apartados por los fans, como si no contaran. Como si no fueran nada."

Además de haber sido aislados por la fama de su padre, los niños tuvieron que soportar tener menos interacción con él.

Paul estaba centrado sobre todo en su carrera, y como resultado, no los veía mucho. Cuando recibía sus guiones, se aislaba de la familia e investigaba sus papeles en diferentes ciudades o países.

Cuando volvía a casa, se mostraba mandón o se excedía en sus atenciones para compensar su ausencia. El ganador del Oscar admitió una vez:

"No tenía ningún talento para ser padre."

Paul nunca sintió una conexión con su papá, y al ser una persona reservada, no podía ofrecer a sus hijos más que eso.

NIÑOS CON PROBLEMAS

Los hijos de Newman pasaron por momentos difíciles, como el abandono de la escuela y dificultades para establecer su propia identidad.

Uno de ellos dijo una vez que mucha gente considera que ser hijo de una figura pública es una vida privilegiada. Sin embargo, para ellos, podía ser agotadora y dolorosa.

Scott, Stephanie y Susan, los tres vástagos de Paul de su primer matrimonio, tuvieron más problemas. Sus padres estaban divorciados, por lo que tenían que ir y venir a casa de cada uno.

Por su parte, sus hermanas pequeñas, Clea, Nell y Melissa, llevaban una vida más equilibrada, ya que vivían con ambos padres. Pese a estas diferencias, lo que todas tenían en común era estar constantemente a la sombra de su famoso papá.

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El hijo mayor de Newman fue uno de los que más sufrió por el estrellato de su padre. Su vida se vio seriamente afectada debido a esto. Cuando crecía, hacía berrinches y Paul incluso se refería a él en broma como "el loco Scott".

Su comportamiento afectó a su trabajo escolar y a su capacidad para encajar con sus compañeros. Como resultado, se vio obligado a abandonar una escuela tras otra.

A medida que el chico maduraba y se convertía en un hombre, se sentía abrumado por la fama del artista. Todo esto lo llevó a consumir drogas y alcohol.

A su vez, Paul no sabía qué hacer con su actitud salvaje y no actuaba como un padre preocupado. Lamentablemente, The New York Times informó de la muerte de su hijo el 21 de noviembre de 1978.

El joven falleció a los 28 años por una sobredosis. Scott murió en la habitación de un hotel de Los Ángeles.

El informe indicaba que había estado tomando pastillas para el dolor por las lesiones sufridas en un accidente de moto. La policía presumió que eso, combinado con el alcohol, causó su muerte.

Su padre quedó desconsolado tras su fallecimiento y deseó haber podido hacer más, según reveló un amigo a Closer Weekly en febrero de 2021.

La segunda hija de Paul, Stephanie, nació en 1951. Trabajó junto a su padre cuando era joven, pero desde entonces se ha mantenido alejada de los focos. Lleva una vida tranquila lejos de Hollywood.

Su hermana menor, Susan, nació en 1953 y, a diferencia de ella, siguió una carrera en el mundo del espectáculo y actuó en ‘Slapshot’, de 1977. Hoy se dedica a sus labores filantrópicas.

Su hermana Nell es la hija mayor de Paul y Woodward. La pareja dio la bienvenida a la chica en 1959. De joven, se centró en su carrera de actriz, pero luego se convirtió en empresaria.

Melissa nació en 1961. Al igual que sus padres, se convirtió en actriz y ha aparecido en películas y programas de televisión. Melissa también es cantante y compositora.

La menor de los hermanos es Clea, a quien Paul y Woodward dieron la bienvenida en 1965. Aunque también trabaja en Hollywood, Clea optó por quedarse detrás de las cámaras. Ha trabajado en la redacción y ha ayudado a producir series como ‘Big Little Lies’.

VIDA AMOROSA

Antes de tener hijos, Paul fue un veterano de la Marina. A los 24 años conoció a su primera esposa, Witte. Ella tenía 19 años y aún no se había graduado en la universidad.

La pareja se enamoró en un pequeño pueblo donde ambos habían hecho un trabajo de teatro en verano. Ese invierno se mudaron a Illinois, para trabajar juntos en una compañía de teatro en Woodstock.

El 27 de diciembre de 1949, Witte y Paul se casaron. Por aquel entonces, la carrera teatral de Newman era un poco accidentada, porque a pesar de su atractivo físico, no se le consideraba un actor protagonista.

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Sin embargo, gracias a su perseverancia, empezó a conseguir papeles menores en la televisión y se presentó a audiciones para obras de teatro. Poco a poco su carrera comenzó a despegar.

Consiguió un papel en la obra ‘Picnic’, donde conoció a la oscarizada actriz Woodward. A pesar de su buen aspecto, la famosa no lo tenía en gran estima. En cambio él sí se sintió atraído por la joven de 22 años nacida en Georgia.

Mientras tanto, en casa había problemas. Su mujer estaba resentida por haber criado sola a dos niños pequeños, mientras Paul pasaba la mayor del tiempo en Manhattan.

Cuando tuvo a sus dos hijos, Witte perdió el interés por su carrera actoral, mientras que a Paul le ocurrió lo contrario. Con Woodward las cosas eran diferentes, ya que ambos tenían gustos comunes que los acercaron.

Witte empezó a sospechar de ellos cuando su esposo pasaba más tiempo con la famosa. Woodward recordó una vez:

"Paul y yo éramos buenos amigos antes de ser amantes. Nos gustábamos".

Pero su matrimonio continuó, pronto él y Witte dieron la bienvenida a un tercer hijo. Sin embargo, el sentimiento de culpa le consumía, ya que estaba dolido y confundido por haber puesto en riesgo a la integridad de su hogar.

Paul recurrió al alcohol como desahogo porque estaba dividido entre la lealtad a sus hijos y la honestidad de sus sentimientos por Woodward.

Finalmente, reconoció que estaba enamorado de ella y se separó. Paul confesó en una ocasión que se sentía culpable por el fracaso de su primer matrimonio, tras haber tenido uno duradero con Woodward. La pareja estuvo casada durante 50 años.

SUS PELÍCULAS

Aparte de su vida amorosa, Paul era conocido como uno de los mejores actores de su época. Protagonizó films como ‘The Hustler’ y ‘Cool Hand Luke’.

Debutó en Broadway en 1953 y comenzó a hacer televisión y cine. El ganador del premio BAFTA murió de cáncer el 26 de septiembre de 2008.

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