Mujer halla cientos de monedas tras pedirle a su abuela enferma que le enviara algunas como señal
Después de pasar más de cuatro décadas de sus vidas juntas, una mujer le hizo una petición inusual a su abuela enferma.
La usuaria de Facebook Michelle Gordon McDougal utilizó la plataforma para compartir la historia de su vínculo inusual con su abuela. Este prevaleció incluso después de la muerte.
Durante los últimos días de vida de su abuela, la mujer se ofreció como voluntaria para pasar tiempo con ella al menos dos veces por semana. Pero en su última noche juntas, Michelle le pidió algo inusual a la anciana. Más detalles abajo.
CUMPLIÓ SU DESEO
Le dijo que le enviara muchas monedas cuando llegara al cielo para que supiera que estaba cerca. Curiosamente, cumplió su deseo. Ella se dirigió a Facebook para compartir fotos de la pila de centavos que había reunido desde el fallecimiento de su abuela.
En su publicación de 2017, Michelle reveló que no obtuvo todas las monedas a la vez. Dijo que las había descubierto lo largo de los años en los lugares más extraños.
Después de adquirir la colección, la mujer decidió embarcarse en un proyecto utilizando los centavos en honor a su abuela.
Ella no pudo evitar sentirse emocionada de que su abuela permaneciera cerca y la estuviera cuidando como lo había hecho desde su nacimiento. La relación entre las dos mujeres se forjó justo después de que Michelle naciera en el cumpleaños número 39 de su abuela.
Como la primera de siete nietos, su conexión no tenía rival cuando se embarcaban juntas en vacaciones familiares, viajes de compras y salidas de chicas.
Eran muy importantes la una para la otra. La bondadosa Nana hizo numerosos sacrificios para asegurarse de que sus nietos crecieran felices y saludables.
EL DEVASTADOR DIAGNÓSTICO
De hecho, Gordon creció, se casó y fundó su propia familia, lo que le dio a su abuela más razones para sonreír. Sin embargo, esa sonrisa pronto desapareció de sus rostros después de que los médicos le diagnosticaran cáncer a la anciana.
Con su resistencia y determinación habituales, la valiente abuela venció la enfermedad y fue declarada en remisión para la felicidad de todos. Desafortunadamente, esa felicidad duró poco, pues la matriarca experimentó una recaída.
Esa segunda vez, los médicos dijeron que estaba más allá del tratamiento y que solo podía esperar su destino. A partir de ahí, los familiares se turnaron para pasar las noches con Nana y mantenerla cómoda.
Por suerte, Michelle tuvo el último turno de cuidar a su abuela. Las dos mujeres pasaron la noche riendo, comiendo comida china y discutiendo todo a su manera habitual de “mejores amigas”.
UNA MEMORABLE NOCHE
Fue durante esa memorable noche que la mujer hizo su petición inusual a su abuela y recibió la aprobación de la anciana. Falleció dos días después.
Inmediatamente después de despedirse de su Nana, la mujer comenzó a encontrar monedas por docenas. Las acumulaba en un gran frasco de vidrio.
“Esas docenas se convirtieron en cientos y cientos de centavos. Mi mamá bromeaba diciendo: ‘Michelle, deberías haberle dicho que enviara billetes de veinte dólares’. Pero los centavos para mí son perfectos”, explicó.
Cuatro años después, finalmente descubrió lo que quería hacer con los centavos. Con la ayuda de su esposo, MacDougal, hizo una losa de madera con tablas viejas de granero y cuidadosamente pegó cada centavo en ella para formar un corazón brillante.
Como toque final, inscribió las palabras “Love & Kisses Nana” (Amor y Besos Nana) en la pizarra. Para ello usó una máquina Cricut y una vieja tarjeta dorada que había recibido de la abuela. ¡Qué mejor manera de inmortalizar su amor!
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