Pareja recibe llamada diciendo que la mamá biológica de su hijo está embarazada de nuevo y quiere que adopten al bebé

Años después de intentar tener un bebé, unos esposos se habían resignado a su destino de que nunca serían padres. Pero un día recibieron una llamada que cambió su vida para siempre.

Tener hijos para algunas parejas es lo más destacado de su matrimonio. La mayoría de los amantes están ansiosos por tener a sus pequeños corriendo por sus casas y agregando una chispa de alegría y diversión a sus vidas.

Para una pareja, su historia de amor comenzó casi a la perfección, pero poco sabían que habría algunos momentos difíciles en el camino. Más detalles abajo.

SUS ESFUERZOS POR TENER HIJOS

Brad y Kelsey Bishop se conocieron durante una entrevista de trabajo hace más de una década. Lo que comenzó como admiración se convirtió en un apasionado romance.

Los dos primeros años de matrimonio fueron una época de placenteras aventuras. En ese entonces, la pareja decidió detener todos los planes de tener hijos en un intento por pasar más tiempo juntos.

Al ver a sus amigas quedar embarazadas tan fácilmente, el dúo pensó que compartiría una experiencia similar. Cuando llegó el momento de intentar tener un bebé, los esposos se enfrentaron al mayor impacto de sus vidas.

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Después de intentarlo varias veces, decidieron visitar a un médico especialista en fertilidad, con la esperanza de obtener respuestas a sus inquietudes.

Por sugerencia del especialista, Brad y Kelsey probaron dos rondas de inseminación intrauterina (IIU), que no tuvieron éxito. Gracias a su seguro, pudieron permitirse el lujo de intentar la Fecundación In Vitro (FIV), que y tampoco dio resultados positivos.

LA DIFÍCIL REALIDAD

Cuatro rondas de FIV fallidas fueron suficientes para convencer a los esposos de que sus esperanzas de tener hijos biológicos eran prácticamente inexistentes. Esta había sido una de las realidades más tristes que tuvieron que enfrentar.

“Nunca olvidaré la llamada telefónica cuando Kelsey me dijo entre lágrimas que no había funcionado. Estaba triste por los resultados, pero estaba más triste por ella. Estaba triste porque a mi amada se le había negado la oportunidad de ser madre”, dijo Brad.

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Varias rondas de fracaso convencieron al dúo de que tener hijos propios no era para ellos. Entonces, con el apoyo de sus amigos, optaron por la adopción.

Después de decidirse, los esposos vendieron rompecabezas para recaudar fondos para la adopción. Según dijeron, el trámite costó varios miles de dólares.

Brad previamente había compartido una publicación de Instagram en la que agradecía a sus amigos por su generosidad. Su apoyo fue lo que los había impulsado a dar el paso para convertirse en padres adoptivos.

SE CONVIRTIERON EN PADRES

Un tiempo después, la pareja le dio la bienvenida a su primer hijo adoptivo, Bennett. Mientras disfrutaban de la nueva vida de ser padres, los esposos nunca imaginaron que tendrían un segundo bebé.

Pero unos meses después, la madre biológica de su hijo llamó para preguntar si les interesaba adoptar al bebé que estaba esperando nuevamente.

En una publicación de Instagram, Brad escribió: “Bueno... hace unas semanas, descubrimos que la mamá y el papá biológicos de Bennett están esperando un hijo nuevamente, y nos preguntaron si adoptaríamos a este bebé”.

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La pareja nuevamente solicitó donaciones a amigos para poder hacer realidad sus sueños. Aquella época de tristeza que los esposos habían experimentado se habían llenado de luz en menos de dos años.

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