Ladrón irrumpe en la casa de una señora de 79 años: ella lo detiene hasta que llega la policía

Un intruso sin pantalones decidió irrumpir en lo que pensó que era la casa de una anciana indefensa. Él estaba equivocado.

Aunque asustada, como cualquiera estaría en una situación tan peligrosa, una mujer de 79 años, del condado de Jackson, Estados Unidos, no dejó que eso la detuviera.

El intruso medio desnudo irrumpió en la casa de la abuela, llamada, Gwendolyn Agard, con un mazo de goma que había tomado de una residencia vecina. Más detalles abajo.

IGNORÓ LAS ADVERTENCIAS

Sin embargo, antes de que lograra entrar a la vivienda, Gwendolyn ya tenía listo su revólver calibre .38. Inicialmente, intentó ahuyentar al individuo mediante una advertencia verbal, gritando.

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“Si entras aquí, date por muerto. Es una promesa”, le dijo la anciana al ladrón, según recordó en entrevista con 11Alive.

La abuela también disparó un tiro de advertencia. Sin embargo, el intruso decidido no hizo caso de esto y procedió a hurgar en la casa de la mujer mayor.

LLAMÓ A LA POLICÍA

Por supuesto, esta abuela no esperaba mantener a raya al individuo posiblemente peligroso para siempre, por lo que llamó a la policía para pedir ayuda. Según destacaron en 11Alive, se percibía un miedo evidente en su voz durante la llamada.

No obstante, la mujer mayor ciertamente no se lo hizo saber al intruso, dejando en claro que no estaba jugando. Al darse cuenta de que tenía que llevarlo al extremo, Agard tomó otro revólver, esta vez calibre .45.

INTENTABA DARLE UN MENSAJE

Mientras el intruso bajaba las escaleras, la anciana de aspecto inofensivo lo sorprendió cuando disparó otro tiro, esta vez con la .45. Le preguntó a Agard si realmente estaba tratando de asesinarlo. Ella recordó el momento, expresando:

“Dije, ‘Oh, finalmente entendiste el mensaje’”, contó la mujer mayor.

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Afortunadamente, la policía pronto llegó y encontró al intruso casi desnudo escondido en un armario. Los oficiales lo esposaron y lo acusaron de allanamiento de morada.

EL PODER DE LA FAMILIA

Mientras tanto, Agard continúa viviendo su vida plena, usando su libertad para pasar tiempo con sus hijos y nietos. La abuela admitió que estos seres queridos estaban en el fondo de su mente durante el presunto intento de robo.

La mujer mayor aseguró que haber pensado en sus seres queridos le dio el valor para mantenerse firme durante el aterrador incidente. “No sé cuál era su intención, pero sé cuál era la mía”, dijo la señora, haciendo referencia al intruso.

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Esta mujer fenomenal demuestra que, sin importar la edad, todavía es posible lograr cosas que por lo general algunos podrían considerar impensables.

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