Embarazada se hace una ecografía: el médico hace silencio al ver que el bebé no está solo allí

Acudir a una ecografía durante el embarazo es una de las mejores experiencias para los futuros padres, ya que pueden ver a sus bebés antes de que nazcan.

Rebecca Roberts quedó embarazada tras muchos años de espera. A continuación te contamos los detalles de su historia y de cómo recibió una gran noticia.

Antes de dar la bienvenida a su hijo, Roberts luchó con problemas de fertilidad. Ella y su pareja, Rhys Weaver, llevaban más de un año intentando quedar en estado, pero todos los esfuerzos eran inútiles. Finalmente, el médico le recetó a Rebecca un medicamento para ayudarla a concebir y funcionó.

En febrero de 2020, Roberts y Weaver se enteraron de que estaban esperando a su hijo tras hacerse una prueba de embarazo en casa, y fue la mejor noticia. Con el paso del tiempo, la pareja acudió a la primera ecografía, y fue una experiencia surrealista.

Después de ver a su bebé en la pantalla y escuchar el hermoso y constante latido del corazón, el obstetra concluyó que todo estaba perfecto. "Recuerdo que salí tan feliz de la primera ecografía", explicó Roberts.

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OCURRIÓ ALGO RARO E INESPERADO

Cinco semanas después, con tres meses de embarazo, Rebecca acudió a su tercera ecografía. Pero esta vez, el ecografista detectó algo impactante que le dejó sin palabras.

"Pensé que había ocurrido algo horrible", recordó Rebecca.

Los médicos le dijeron a la futura madre que estaba esperando gemelos, concebidos con tres semanas de diferencia. El término que describe este raro suceso se llama superfetación.

La Dra. Lisa Thiel, especialista en medicina materno-fetal de Spectrum Health, en Michigan, explicó el fenómeno así:

"La superfetación se produce cuando un segundo embarazo se implanta unos días o semanas después de que se produzca el embarazo inicial. Un nuevo óvulo es fecundado por un nuevo espermatozoide".

"La razón por la que esto es tan raro es porque el cuerpo de la mujer libera hormonas para evitar una nueva ovulación, y se crea un moco espeso en el cuello del útero para evitar que cualquier otro espermatozoide entre en el útero en ese momento", añadió.

Por desgracia, la felicidad de Roberts y Weaver pronto se convirtió en ansiedad y tristeza. Los doctores le explicaron a la madre que como los gemelos fueron concebidos en momentos diferentes, el bebé más pequeño podría no sobrevivir.

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A la pareja le rompió el corazón. Aun así, los padres no se rindieron. Pero en algún momento, la gemela más pequeño había dejado de crecer correctamente por problemas con su cordón umbilical. Así que, a las 33 semanas, los médicos indujeron el parto y Roberts dio a luz a sus bebés.

EL NACIMIENTO DE LOS GEMELOS

Noah y Rosalie nacieron en septiembre de 2020. Noah pasó tres semanas en la UCIN, mientras que su hermana fue enviada a un hospital particular donde permaneció 95 días. Roberts confesó que ver a los gemelos separados le rompió el corazón. Pero al final, la familia se reunió poco antes de Navidad.

Desde el reencuentro, los gemelos son inseparables. La orgullosa madre de dos dijo que Rosalie y Noah comparten un vínculo increíble.

"Cuando los acostamos uno al lado del otro, es como si se conocieran al instante, y estiran la mano y se tocan la cara, y es lo más bonito", explicó.

Esperemos que el vínculo de Noah y Rosalie permanezca intacto, y que la niña crezca sana. Esta historia será un recordatorio de que los niños son un regalo de Dios, y que cambiarán la vida de sus padres para siempre.

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