La casa de 53 años de Betty White fue demolida - Fotos del antes y después de la casa familiar con el "amor de su vida", Allen Ludden

Betty White vivió en su casa familiar durante 53 años hasta su último día. Ahora, un año después de su muerte, la vivienda ya no existe.

La casa de la célebre actriz Betty White se vendió después de su fallecimiento en 2021. La vivienda tenía una impresionante superficie de 923 metros cuadrados y cuenta con cinco habitaciones y seis baños.

La edificación de dos pisos se completaba con un amplio jardín y una vista brillante del museo Getty cercano. El exterior estaba pintado principalmente de blanco, y todas las ventanas tenían contraventanas rústicas de madera pintadas de amarillo.

Vivió allí durante más de cinco décadas

La casa también ofrecía un cómodo porche con un techo ancho, un gran banco amarillo y un colorido arreglo de flores en el jardín que se extendía a su alrededor.

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Betty estuvo viviendo en la casa de Brentwood, Los Ángeles, desde 1968, cuando se mudó a la propiedad con su tercer esposo, Allen Ludden.

Los dos disfrutaban de numerosos juegos de charadas con amigos cercanos en los espaciosos confines de la casa de huéspedes. La vivienda también tenía una terraza acristalada con una hermosa vista al jardín.

A la actriz de “Ladies Man” le encantaba relajarse mientras contemplaba la variedad de árboles, flores y arbustos que llenaban su patio trasero.

Una gran piscina también se extendía por el lujoso césped. La casa en sí era una mezcla de madera y piedra, y presentaba grandes ventanales, así como hermosos miradores.

Con un amplio camino de entrada, una gran puerta de hierro forjado y una llamativa puerta de entrada amarilla, la vivienda exigía la atención de cualquier espectador a primera vista.

Debido a su ubicación en Los Ángeles, según reportes, tenía más sentido comercializar la propiedad como un derribo para garantizar el precio de venta más alto posible.

La vida de Betty tras la muerte de su esposo

La actriz pasó 13 años felices con su amado esposo, pero en 1981, Allen Ludden falleció a la edad de 63 años. Él había estado luchando contra el cáncer de estómago antes de su muerte, y falleció poco antes de que su esposa comenzara su exitoso programa “Golden Girls”.

Después de su muerte, Betty White se aferró a su casa de dos pisos hasta que ella falleció. Pero la vivienda no era lo único que tenía que cuidar después de que su difunto esposo dejara este mundo.

Ella se convirtió en la madrastra de los tres hijos de Ludden, y aunque nunca quiso ser madre, los amaba con todo su corazón.

“Nuestra relación era tan genial que me llamaban ‘Dama Dragón’ con cariño. Incluso después de todos estos años, nos amamos mucho y estoy muy orgullosa de los hijos que heredó esta chica profesional”, confesó la actriz en su autobiografía.

Irónicamente, White era tan inflexible en no querer tener hijos que supuestamente terminó su segundo matrimonio porque su esposo en ese momento deseaba ser padre.

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Al final, asumió bastante bien el papel de madrastra, aunque al principio fue una lucha y tuvo que construir relaciones gradualmente.

En una ocasión, la comediante dio un recorrido por la casa que compartió con Ludden, mostrando en un video humorístico las cinco habitaciones llenas de objetos y varios animales de peluche.

Ella admitió que le encantaban los animales de peluche y dijo que incluso los saludaba cada vez que entraba en una habitación y se despedía de ellos cuando se iba.

Tristemente, Betty falleció por causas naturales en su hogar a la edad de 99 años el viernes 31 de diciembre de 2021. Poco después de que se supo la noticia, admiradores llenaron la calle frente a la propiedad con flores y recuerdos para conmemorar la vida del ícono de la televisión.

La casa de White fue vendida y derribada

Después de la muerte de la actriz, su casa se puso a la venta. Un año después, los administradores de la finca encontraron un comprador.

La propiedad de Los Ángeles, que se vendió por la asombrosa suma de $10.678 millones, fue demolida poco después de que el nuevo comprador la adquiriera. Solo había quedado en pie una chimenea, que fue derribada a los pocos días.

La noticia fue transmitida en Facebook por la asistente personal de White, Kierstan Mikelas. Ella publicó una serie de fotos que muestran el lote ahora vacío, algunos escombros de construcción y la chimenea solitaria.

Subtituló la publicación diciendo que la casa se había ido y que la chimenea pronto seguiría. Ella publicó:

“¡Hola a todos! Les debo una publicación (o dos), lo sé. La casa de Betty de Brentwood ya no existe (a excepción de la chimenea, que desaparecerá en poco tiempo). ¡Prometo un maravilloso homenaje a nuestra dama más maravillosa muy pronto!”.

La actriz compró la casa con Ludden, quien era el “amor de su vida”. Los dos pasaron muchos años felices juntos y se conocieron mientras trabajaban juntos en dos obras de teatro.

Ni siquiera un anillo de diamantes pudo convencerla de casarse con Allen Ludden al principio. Después de sus dos primeros matrimonios, no tenía intención de volver a casarse.

“Me arrepiento de ese año que desperdicié diciendo que no. Habría dado cualquier cosa por recuperarlo. Era una historia de amor”, dijo Betty sobre el año que pasó rechazando a Allen.

Eventualmente, Ludden la agotó y logró que ella aceptara enviándole un conejito de peluche junto con dos aretes con gemas. Cuando él la llamó esa noche, ella no pudo resistirse más y contestó el teléfono con un decidido “sí”.

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Después de la muerte de Allen, Betty nunca se volvió a casar y se quedó en la casa en la que vivieron juntos.

“Tuve el amor de mi vida. Si has tenido lo mejor, ¿quién necesita el resto?”, dijo ella. Después de esforzarse para formar relaciones significativas con sus hijastros, se llevaron muy bien.

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