LeBron James, estrella de la NBA, fue "nómada" hasta los 9 años y una persona le ofreció cobijo

• LeBron James es uno de los mejores jugadores de baloncesto de todos los tiempos, pero tuvo un duro comienzo en la vida.
• Fue un vagabundo durante la mayor parte de su infancia, yendo de un sitio a otro.
• Pero su destino cambió cuando encontró a alguien que le ofreció cobijo y orientación y encendió su amor por el baloncesto.

El jugador de la NBA LeBron James es una conocida superestrella del baloncesto, que juega en Los Angeles Lakers. Dos veces medalla de oro olímpica y una fuerza a tener en cuenta en la cancha, su trayectoria hasta convertirse en el máximo anotador de todos los tiempos de la NBA es un testimonio de su incesante búsqueda de la grandeza.

La ilustre carrera de LeBron ha estado marcada por varios hitos, pero quizá ninguno tan significativo como el momento en que superó el récord de la NBA en temporada regular que ostentaba Kareem Abdul-Jabbar.

Este logro se produjo durante la campaña 2023/24, una temporada en la que también se convirtió en el primer hombre en levantar la Copa NBA tras llevar a su equipo, Los Ángeles Lakers, a la victoria contra los Indiana Pacers en la final del Torneo de Temporada de la NBA.

Pero las hazañas récord de LeBron no empezaron aquí. Al final de la temporada 2022/23, había acumulado la asombrosa cifra de 38.652 puntos en temporada regular y ostentaba el récord de puntos en playoffs con 8.023. Esto elevó su total a unos impresionantes 46.675 puntos en su carrera, lo que le colocó firmemente en lo más alto de la lista de anotadores de todos los tiempos de la NBA.

En su camino hacia el estrellato, LeBron tuvo que superar muchos retos. Nacido de una madre soltera, Gloria James, que entonces sólo tenía 16 años, los primeros años de vida de la estrella estuvieron marcados por la inestabilidad y las dificultades.

Vivían en casa de la madre de Gloria, en Akron, Ohio, pero sus vidas dieron un giro drástico cuando la abuela de LeBron falleció repentinamente de un ataque al corazón el día de Navidad, cuando él sólo tenía tres años.

Sin ningún sistema de apoyo y careciendo de las habilidades y la educación necesarias para salir adelante, a Gloria le resultó increíblemente difícil mantener a su hijo pequeño. Ella y sus dos hermanos hacían todo lo posible por mantener habitable su vieja y espaciosa casa, pero el coste de la calefacción superaba sus posibilidades.

A la tierna edad de tres años, LeBron y su madre se encontraron buscando refugio en casa de una vecina, Wanda Reaves, debido a las inseguras condiciones de su hogar. Madre e hijo llegaron a casa de la mujer sin más equipaje que una maleta y un elefante azul de peluche.

Wanda les ofreció un sitio en su sofá, lo que marcó el comienzo de un viaje nómada de seis años para madre e hijo, que se enfrentaban a los retos del crecimiento. La pérdida de la casa les obligó a trasladarse de un lugar a otro, viviendo en un estado de incertidumbre constante. A lo largo de tres años, se mudaron una docena de veces, un periodo que LeBron recuerda como "aterrador".

Cuando estaba en cuarto curso, LeBron ya había experimentado una vida de constantes traslados, pasando de un piso a otro con Gloria. Su hogar durante este periodo fue un sofá en un apartamento de una habitación, a menudo escenario de fiestas nocturnas y visitas de la policía. Su madre, que entonces tenía 25 años, había dejado hacía poco su trabajo en Payless Shoes y vivía de la asistencia social.

Salía a menudo, dejando a LeBron a su suerte. Se pasaba el día faltando a clase, jugando a la videoconsola y visitando la tienda de la esquina, donde pagaba los bocadillos con los vales de comida de su madre.

La trayectoria educativa de LeBron durante esta época estuvo llena de obstáculos. Sólo en su cuarto curso, faltó a clase casi 100 días y tuvo problemas para mantener el ritmo académico. A pesar de toda la confusión por la que pasó, no era un alborotador. Se comportaba bien, pero sus frecuentes faltas de asistencia durante el cuarto curso suponían un riesgo importante.

La interrupción de su educación amenazaba sus posibilidades de progresar académicamente y, en consecuencia, sus perspectivas. Gloria trabajaba incansablemente, aceptando trabajos en cualquier sitio y lugar para llegar a fin de mes. Hubo momentos en que no sabían si llegarían al día siguiente.

Pero a pesar de todo, el amor de Gloria por su hijo nunca flaqueó. Ella fue su roca, proporcionándole una sensación de seguridad y estabilidad en medio del caos. Cuando LeBron tenía nueve años, ella tomó una decisión difícil. Reconociendo que su hijo necesitaba estabilidad, lo envió a vivir con su entrenador del equipo de fútbol, "Big Frankie" Walker, y la familia de éste.

Esta decisión, aunque difícil, fue impulsada por su amor a su hijo y su deseo de proporcionarle el apoyo y la seguridad que creía que necesitaba. Para LeBron, este cambio supuso una nueva sensación de estabilidad. Por primera vez, pudo pasar un año entero en el mismo colegio, dormir en la misma cama todas las noches y jugar en el mismo equipo de fútbol durante una temporada completa.

Fue un regalo precioso para LeBron. Walker incluso le introdujo en el baloncesto, metiéndolo en su primer equipo. "Los Walker estaban preocupados por mi estilo de vida nómada a la tierna edad de nueve años", escribió LeBron. A pesar de la distancia, el chico podía ver a su madre, que se quedaba en casa de su amiga, todos los fines de semana, manteniendo su estrecho vínculo.

Durante su estancia con los Walker, LeBron compartió habitación con uno de sus tres hijos, Frankie Walker Jr., que no sólo era compañero en su equipo de fútbol, sino que también se convirtió en uno de sus mejores amigos. Fue su primer encuentro con lo que más tarde describiría como "una familia de verdad".

Los Walker, ambos muy trabajadores, con Frank empleado en la Autoridad Metropolitana de la Vivienda de Akron y su esposa, Pam, trabajando en la oficina de un congresista local, inculcaron a LeBron los valores de la disciplina y el trabajo duro. Sus responsabilidades incluían limpiar el baño cada dos fines de semana, y su rutina diaria giraba en torno a la escuela y los entrenamientos de baloncesto.

LeBron estaba matriculado en la escuela primaria Portage Path, una de las más antiguas de Akron. A pesar de ser una escuela del centro de la ciudad, de bajos ingresos, donde cerca del 90% de los alumnos tenían derecho a almuerzos gratuitos, la escuela estaba a la vanguardia de la aplicación de lo que la administración denominaba "aprendizaje holístico".

LeBron floreció en este entorno, sintiendo especial predilección por la música, el arte y las clases de gimnasia. Mantuvo una asistencia perfecta durante el resto del curso escolar. Cuando Gloria consiguió alquilar un piso de dos habitaciones con la ayuda de un programa de asistencia del gobierno, el niño volvió a vivir con ella.

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Vivieron juntos hasta que se graduó en el instituto. Como dice el refrán, el resto es historia. Una constante en la vida de LeBron fue el apoyo inquebrantable de su madre, Gloria. Ella lo era todo para él: su madre, su padre, su roca. Le daba prioridad por encima de todo.

Independientemente de las circunstancias, LeBron estaba seguro de que él era la persona más importante de su vida. Aunque a menudo carecían de posesiones materiales, nunca se sintió insignificante o poco querido. Y aunque la mayoría de la gente le ve como un campeón, Gloria es la verdadera campeona a los ojos de su hijo.

"Puedo con ello", dice a menudo. Este mantra le ha servido de guía en las pruebas y tribulaciones de la vida. Mucha gente suele destacar la profunda devoción de LeBron por su madre. Esto es cierto, pero es un reflejo de su inquebrantable devoción por él cada minuto de su vida. Su madre le inculcó la esencia de la verdadera devoción.

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Inspirado por Gloria, LeBron ha convertido en su misión devolver, sobre todo a los niños que crecen en hogares monoparentales, a través de iniciativas como la Fundación Familia LeBron James.

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