Los cinco matrimonios infelices de Laura Flores: quiénes son sus ex y sus hijos

Laura Flores vivió cinco matrimonios marcados por conflictos, separaciones y decisiones difíciles. Esta es la historia de sus exesposos y de los cuatro hijos que ha criado, dos biológicos y dos adoptivos.

La actriz mexicana Laura Flores ha estado bajo los reflectores durante más de cuatro décadas, protagonizando telenovelas y participando en programas de televisión. Sin embargo, su vida sentimental ha sido igualmente intensa que su carrera, con cinco matrimonios que no llegaron a buen término.

Además de sus relaciones, la maternidad también ha ocupado un lugar central en su vida. Flores es madre de cuatro hijos, dos biológicos y dos adoptivos, que ha criado mayormente fuera del ojo público.

A lo largo de los años, Laura Flores vivió momentos complejos en cada uno de sus matrimonios. Algunos incluyeron conflictos familiares, separaciones abruptas y situaciones dolorosas. Esta es la historia de sus exesposos y de sus hijos, quienes han sido su principal sostén en medio de tantos cambios.

Sergio Fachelli: una unión controvertida desde el inicio

El primer matrimonio de Laura Flores fue con el cantautor uruguayo Sergio Fachelli. Se casaron en junio de 1986 y, desde un comienzo, enfrentaron la oposición de la familia de ella. Sus hermanos se negaron a asistir a la ceremonia religiosa e incluso amenazaron con cancelarla.

Este rechazo familiar fue solo el inicio de una relación complicada. La pareja se separó pocos años después, citando "incompatibilidad de caracteres". En entrevistas posteriores, Flores concluyó que el matrimonio había sido un error. "Ese matrimonio no tenía por qué haber sido, no teníamos que casarnos. Lo que pasa es que mi papá era muy celoso, muy controlador, se dio cuenta que nos fuimos de vacaciones, nos fuimos un fin de semana juntos, y mi papá nos cachó y yo dije ‘nos va a matar’. Y sí, estaba furioso, y qué hago, pues me caso", declaró.

Décadas después, la actriz aseguró que su matrimonio con Fachelli estuvo marcado por violencia, aunque no dio detalles por respeto a su exesposo.

Miguel Ángel Durán: un matrimonio breve con un giro inesperado

En 1992, Laura Flores se casó con el cirujano plástico Miguel Ángel Durán. Sin embargo, el matrimonio duró solo cuatro meses: Flores descubrió que Durán aún estaba legalmente casado con otra mujer. La noticia causó un gran impacto en su vida personal, y marcó el fin inmediato de esa relación.

José Ramón Diez: el matrimonio más largo y la llegada de sus hijos biológicos

Después de dos uniones fallidas, Laura Flores contrajo matrimonio con el empresario José Ramón Diez en 1998. Esta relación duró cerca de una década y fue una de las más estables de su vida sentimental. Durante ese tiempo nacieron sus dos hijos biológicos: María y Patricio.

La actriz enfrentó importantes desafíos para convertirse en madre. Tuvo dos abortos espontáneos y se sometió a nueve procesos de fecundación in vitro. Finalmente, logró concebir a sus hijos con Diez. María nació primero y Patricio llegó al mundo en 2006 en Houston, Texas.

A pesar de los esfuerzos por salvar la relación, la pareja se separó. Flores explicó que "de ambas partes hay cosas que se rompieron y que ya no se pueden rescatar". En el momento de la separación, los hijos de la pareja permanecieron con ella, mientras que los hijos de José Ramón, fruto de una relación anterior, se quedaron con su padre.

Eduardo Fonseca: una relación breve

En 2013, Laura Flores volvió a casarse, esta vez con el ingeniero aeronáutico Eduardo Fonseca. La relación fue corta y terminó en menos de un año. No se dieron a conocer mayores detalles sobre la causa de la separación, pero se sabe que no llegaron a formar una familia juntos.

Aunque no tuvieron hijos en común, durante ese período Flores ya era madre de dos niños adoptados: Alejandro y Ana Sofía. Ambos fueron adoptados en México siendo muy pequeños, y han crecido al lado de su madre y sus dos hermanos mayores.

Matthew Flannery: el último matrimonio que también terminó

El quinto matrimonio de Laura Flores fue con Matthew Flannery, un hombre ajeno al mundo del espectáculo. Se casaron en 2019 en secreto por lo civil ese mismo año. En diciembre de 2020, celebraron su unión religiosa y la actriz compartió la noticia con entusiasmo al declarar: "No hay quinto malo".

Durante los primeros años, Flores expresó sentirse emocionalmente conectada con Flannery. "Es la primera vez que me siento tan enganchada emocionalmente y en todos aspectos con una pareja, me siento muy unida, somos como una mancuerna muy bonita", dijo entonces.

Sin embargo, en 2023 anunció su divorcio a través de Instagram. Afirmó que la separación se dio por mutuo acuerdo. "Matt siempre contará con mi respeto y apoyo y le estaré siempre agradecida por los 4 maravillosos años que compartimos juntos", escribió la actriz.

También afirmó que los unía una relación de amistad inquebrantable. "Matthew y yo siempre seremos amigos incondicionales. Por que fuimos una parte importante el uno del otro, por que un buen amor jamás se olvida, nos unimos con respeto, y nos separamos con respeto", afirmó.

Actualmente, Matthew Flannery reside en Georgia, mientras que Laura Flores vive con sus hijos en Florida.

Sus cuatro hijos: María, Patricio, Alejandro y Ana Sofía

Además de sus cinco matrimonios, la maternidad ha sido una parte esencial en la vida de Laura Flores. Sus hijos biológicos, María y Patricio, nacieron de su relación con José Ramón Diez. Ambos han vivido con ella y han crecido alejados de los medios, aunque han aparecido ocasionalmente en redes sociales.

Los otros dos miembros de su familia son Alejandro y Ana Sofía, a quienes adoptó siendo pequeños. La actriz los ha criado como hijos propios. Según lo que ha compartido en sus redes, sus hijos actualmente estarían estudiando en el extranjero.

Laura Flores ha vivido una trayectoria personal marcada por relaciones sentimentales complejas y una profunda dedicación a la maternidad. A través de cinco matrimonios y numerosos desafíos, ha formado una familia con cuatro hijos que representan una parte central de su vida. Su historia refleja una vida íntima llena de cambios, decisiones difíciles y vínculos que dejaron huellas.