Historia de constructor que descubrió mensaje secreto de 1943 en casa antigua

Un constructor que estaba renovando una casa descubrió en una chimenea una antigua carta de Navidad perdida hace mucho tiempo.

Según informó Newsner, Lewis Shaw y sus colegas, de Southcote en Reading, como muchas otras veces, tenían que renovar una casa vieja. Esta vez se trataba de una casa adosada de los años treinta en Oakley Road, Caversham, en Reading, Berks.

Pero cuando los trabajadores comenzaron a derribar una antigua chimenea que se encontraba en el lugar, la situación cambió inesperadamente.

“Normalmente encontramos periódicos antiguos, cerillas o paquetes de cigarros. Pero nunca nada como lo de ahora”, dijo Lewis a ODN.

Lewis y sus colegas no podían creer lo que veían. En la parte de arriba de la chimenea había un papel doblado que debió haber sido escrito hace muchos años, pero el mismo se encontraba en perfecto estado.

Cuando Lewis desdobló el papel vio que la escritura debía pertenecer a un niño. Al parecer se trataba de una carta mágica escrita en el año 1943 por un pequeño llamado David.

A diferencia de los jóvenes de hoy, que le piden a Papá Noel los últimos juguetes, artilugios y productos electrónicos, el niño simplemente pidió cualquier "pequeño juguete" que Papá Noel tuviera "de sobra".

Mira el siguiente video para que conozcas más detalles.

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Su conmovedora nota escrita a mano decía: "Querido Papá Noel, por favor, puedes enviarme un anuario de Rupert, y una caja de tizas, soldados e indios, pantuflas, corbata de seda, caja de lápices y cualquier pequeño juguete que tengas que tengas de sobra. Con amor, David".

"La lista es muy humilde y modesta", dijo Shaw. "No sé qué edad tiene, pero parece que fue escrito justo después de la Segunda Guerra Mundial”.

"Realmente es bastante dulce, ha pedido cosas que realmente quiere, mientras que los niños ahora solo quieren lo que otros niños tienen".

Shaw dijo que esperaba reunir la carta con su dueño y presentarle todos los regalos que había pedido de niño.

Agregó que no sabía quién era el niño ni cuántos años tenía cuando la escribió, pero creía que se trataba del hijo del antiguo propietario, ya que la casa había pertenecido a la familia durante dos generaciones antes de que el propietario actual la comprara hace dos años.

Pero, gracias a la difusión en las redes sociales, el mensaje encontró a su verdadero dueño, David, quien se puso en contacto con los trabajadores.

Entonces los trabajadores decidieron entregar a David aquellos regalos de navidad que deseaba en el año 1943, y la historia tuvo el final que debía tener.