Casaron a su hija de 5 años a cambio de 3.500 dólares para pagar tratamiento médico de su hijo
La sequía y la guerra son dos de los grandes enemigos de las familias afganas que viven de la agricultura. Aunado a estas, aparece la necesidad imperante de la salud, que lleva a los padres a tomar la decisión más difícil: vender a sus hijas en matrimonio para pagar las deudas.
La familia de Nazanin, una niña que hoy tiene 11 años, comprometió a la pequeña cuando apenas tenía 5, a cambio de recibir 3.500 dólares que al final serían destinados al tratamiento de su hermano pequeño, de 4 años, que sufría ataques de epilepsia.
Los padres de la novia, que viven en el campo de refugiados Shahrak e Sabz, cerca de Herat, en el oeste de Afganistán, explicaron que el dolor del niño era insoportable, y en una acción desesperada por salvar al niño, aceptó renunciar a su hija.
Niñas afganas en la escuela. | Foto: Pexels
En Afganistán, la edad legal para el matrimonio es 16 años para las chicas y 18 años para los chicos. Pero muchos se casan a edades más tempranas.
Según un informe de Unicef de 2018, el 35% de las niñas afganas están casadas antes de los 18 años, y el 9% se casan antes de los 15.
Lamentablemente para todos, aceptaron el dinero pero el tratamiento del pequeño no funcionó, por lo que el sacrificio no sirvió de nada.
En este sentido, el padre explicó que cualquiera que haga eso con una hija, claramente terminará arrepintiéndose, pero que eso no sirve de nada.
Esta pareja nunca asistió a la escuela y no sabe leer o escribir. No obstante, han tenido siete hijos: tres son niñas y cuatro son niños.
Ahogado por las deudas, el padre de Nazanin señaló que "si mi miseria continúa, y encuentro alguien dispuesto a darme dinero por mis otras hijas, haré lo mismo. Mis prestamistas me están llamando dos o tres veces al día para que les pague lo que les debo".
Soldado camina por zona árida de Afganistán. | Foto: PxHere
LA SEQUÍA MORTAL LOS GOLPEÓ
Esta familia, que trabajaba en campos agrícolas, fue golpeada por la mortal sequía que acabó con la mayor parte de Afganistán en 2018.
Sus animales murieron deshidratados y la familia abandonó su pueblo natal en la provincia de Badghis, en el noroeste de Afganistán, para trasladarse al campamento cercano de Herat, la tercera ciudad más grande de Afganistán, situada cerca de la frontera con Irán.
Según Naciones Unidas, 275.000 personas tuvieron que desplazarse de Afganistán occidental debido a la sequía.
Esta situación ha puesto en jaque a muchas familias que ahora enfrentan la pobreza y tienen pocas oportunidades de empleo.
Por esto mismo, la familia decidió realizar una boda temprana, para recortar los gastos de alimentación. Así que el año pasado, cuando Nazanin tenía 10, organizaron la boda e invitaron a más de 100 personas. Pero estuvo lejos de ser un evento feliz.
"Si no estuvieras en una situación tan desesperada, no aceptarías el matrimonio de una niña tan pequeña. Juro que no lo hubiera hecho, pero necesitaba el dinero. Fui obligado por mi necesidad", insistió el padre.
Niños afganos. | Foto: Pixnio
Pero a todas estas, la protagonista de toda esta situación no tuvo voz en su propio destino, como sucede con gran parte de las niñas afganas. Nunca le contaron lo que se supone debe ser un matrimonio ni lo que implica la vida de casada, por lo que la niña, naturalmente no ha sabido cómo actuar con su nueva familia.
Su madre cuenta que Nazanin "pasó dos meses en casa de sus suegros. La trataron como a su propia hija. Su esposo tiene unos 12 años. También es muy tímido y no habla mucho".
Pero como no pudo adaptarse, sus padres la pidieron de vuelta por un tiempo hasta que crezca y los suegros aceptaron, pero la acogerán de vuelta en dos o tres años más.
NUEVA LEY MATRIMONIAL EN DEFENSA DE LAS MENORES AFGANAS
Unicef documentó 161 compromisos y matrimonios infantiles en Herat y Badghis entre julio y octubre del año pasado. De ellos, 155 involucraron a niñas y seis a niños.
"El matrimonio infantil es una norma social bien arraigada en algunas partes del país. La situación empeora por la guerra y la sequía", dice la jefa de comunicación de Unicef en Afganistán, Alison Parker.
Niñas afganas refugiadas. | Foto: Unicef
"De julio a octubre hubo una subida en las bodas infantiles. Pero desde entonces, ha habido una fuerte intervención del gobierno, que ha resultado en una clara reducción de estas bodas".
El gobierno afgano está desarrollando una ambiciosa campaña de cinco años para terminar con todas las bodas forzadas y de menores para 2021.
Una ley que aumentará la edad mínima para que las niñas puedan casarse a los 18 años está pendiente de aprobación en el Parlamento.
Una situación similar está ocurriendo en México, donde la Comisión de Justicia de la Cámara de Diputados está trabajando por conseguir una ley para prohibir el matrimonio infantil, que constituye un grave problema en ese país latinoamericano. Entérese aquí de los detalles.