Isabel Sartorius, ex del Rey Felipe VI: una madre adicta y su amistad con Doña Letizia

¿Recuerdas a Isabel Sartorius, exnovia del Rey Felipe? En esta nota leerás un poco sobre la vida de la “novia de España”, sus logros y tormentos.

Nacida en Madrid el 20 de enero de 1965 de los Marqueses de Mariño, Vicente Sartorius Cabeza de Vaca e Isabel Zorraquín e Ibarguren, su infancia transcurrió entre España, Perú y Estados Unidos.

A los 8 años, sus padres se separaron, por lo que ella, sus hermanos Cecilia y Luis, y su madre se trasladaron a Lima desde Madrid. Al finalizar sus estudios, Isabel se mudó a Washington, EE.UU., para estudiar Ciencias Políticas en la American University. Trabajó como traductora en las Naciones Unidas y como publicista del Washington Post.

Al regresar a Madrid, en 1987, Isabel trabajó con las marcas Puleva y Porcelanosa. No obstante, cuando emprendió un negocio de bolsos llamado YS, fracasó rotundamente. La entonces Princesa Letizia de España incluso la ayudó luciendo sus accesorios, pero ni eso hizo surgir YS.

Sartorius también hizo una que otra colaboración televisiva en España y optó por estudiar coaching, actividad que, según ha dicho, le ha resultado terapéutica.

Entre sus parejas estuvieron, el entonces Príncipe Felipe, su amigo Ricky Fuster, el economista Javier Soto Fitz-James (con quien tuvo a su hija Mencía en 1997), Gerardo Lorenzo, el empresario Fernando Ballvé Lantero y César Alierta (el expresidente de Telefónica).

UNA INFANCIA DURA

En 2012, tres años después de la muerte de su madre, Isabel Zorraquín e Ibarguren, Sartorius publicó un libro autobiográfico en el que develó ciertos aspectos íntimos y devastadores sobre su infancia. Por ejemplo, la adicción a la cocaína de su progenitora.

Sartorius dice en sus memorias tituladas ‘Por ti lo haría mil veces’ que la relación con su madre fue “el eje” de su vida.

“Estábamos tan unidas, la quería y me preocupaba tanto que me até a ella”, creando una relación de “codependencia”.

De acuerdo a la exnovia del Rey Felipe VI, su madre comenzó a tener problemas cuando se casó con el ex primer ministro peruano, Manuel Ulloa, tras haberse separado de Vicente Sartorius, papá de Isabel.

“Mi madre se sentía muy sola y se refugió en la droga porque sentía que había fracasado en su segundo matrimonio”, contó la autora.

En una oportunidad, su hermana le confesó haber visto a su madre “meterse unos polvitos blancos por la nariz”, cosa que la mujer negó rotundamente.

“¡Qué tontería! Ya sabes cómo es tu hermana. No le hagas ni caso (...)”, habría dicho Zorraquín e Ibarguren a Isabel.

Lo peor del caso era que la chica, siendo tan joven, no entendía que la droga en realidad perjudicaba a su madre, por lo que incluso le hizo el favor de conseguirle la sustancia en varias oportunidades.

“No le dije a mi madre que no iba a ningún sitio (a comprarla), que ya estaba bien que tenía que dejar de meterse esos polvos. Al contrario, la ayudé porque pensaba que era lo correcto. Me mandaba a por ella y yo iba: habría hecho cualquier cosa”, admitió Isabel.

UNA AMISTAD CON LA NOVIA DEL PRÍNCIPE

El rostro de Isabel se hizo conocido en 1989, luego de que ella y el actual Rey de España, Felipe VI, se volvieran novios. Su relación llegó a su final en 1991.

Luego de esta ruptura, la madrileña y el príncipe continuaron su amistad y, de hecho, ella pudo conocer a Letizia y volverse su amiga gracias a que todavía se mantenían en contacto.

“Igual que me pasó con el príncipe, lo mío con ella también fue un flechazo. El príncipe nos presentó una tarde en Zarzuela, a la semana del anuncio de su compromiso […] El carácter de la princesa me gustó desde el primer momento. En nada de tiempo hablábamos entre nosotras como si nos conociésemos de años. Es una buena amiga”, relató Isabel en sus memorias.

Gracias a esta curiosa amistad, Letizia se ofreció a hacerle publicidad a su marca, pero, de igual forma, YS no tuvo éxito.

Sartorius ha llegado a decir que ahora tiene más contacto con la Reina Letizia que con su ex.