Meghan Markle y Harry fueron fuertemente abucheados en su regreso a Londres
Meghan Markle y el príncipe Harry volvieron a tierras británicas luego de estar varias semanas lejos del país, pero no fueron recibidos de la mejor manera.
Aunque para algunas personas su regreso fue triunfal, otra parte de la sociedad no los recibió con el mismo cariño de siempre y se lo demostraron.
Fueron abucheados y les gritaron demostrando así el rechazo a la decisión de mudarse a otro país y abandonar sus funciones en la casa real.
La duquesa de Sussex mantuvo su postura y nunca dejó de sonreír y Harry se mostró más serio. A pesar de esa situación ninguno permitió que eso amargara su asistencia a la entrega de los premios Endeavour, donde lucieron radiantes.
Desde que se fueron a Canadá, la pareja ha seguido generando controversia en los medios de comunicación.
Los duques decidieron despojarse del peso y responsabilidad que conllevaba estar en Inglaterra y tomaron una vida más normal y similar a la de cualquier familia.
Hay que recordar que según el comunicado que ofreció la reina, los Duques de Sussex no emplearán los títulos HRH (Su Alteza Real) tras anunciar que abandonarían sus puestos como miembros ‘mayores’ de la familia real británica.
La pareja dejará de ser miembro activo de la familia real, e incluso reembolsará los fondos de la Sovereign Grant que gastó recientemente para renovar su residencia, Frogmore Cottage (aproximadamente 3 millones de dólares de los contribuyentes británicos).
Deberán alejarse de sus responsabilidades reales y ya no representarán a la reina Elizabeth II. Harry y Meghan ya no recibirán fondos para deberes reales, acuerdo que entrará en vigencia en la primavera de 2020.
Si bien las medidas suenan extremas, la reina dejó claro que su nieto y su esposa siempre serán miembros “queridos de mi familia”, entiende los desafíos que ambos han vivido a causa del “intenso escrutinio en los últimos dos años”, y reiteró su apoyo a “su deseo de una vida más independiente".
La Reina Elizabeth agradeció a Harry y a Meghan por el trabajo que dedicaron al “país, a la mancomunidad y más allá”, y se mostró orgullosa por lo bien que la exactriz de Hollywood se adaptó y volvió parte de la familia real “tan rápidamente”.
A comienzos de año fue que anunciaron que abandonarían sus roles como miembros mayores de la familia, y que dividirían su tiempo entre el Reino Unido y América del Norte, trabajando para volverse independientes en el ámbito financiero.
Harry y Meghan seguirán siendo los Duques de Sussex, título que recibieron de parte de la reina el día de su boda, el 18 de mayo de 2018, y podrán mantener sus patrocinios privados a organizaciones y proyectos sociales que han apadrinado hasta ahora.
Todo lo que la pareja haga respetará los valores de Su Majestad, mientras que el padre de Harry, el Príncipe Charles continuará dándoles apoyo financiero privado. Harry seguirá siendo príncipe, un beneficio de nacimiento.