5 años sin Santi Trancho: la tragedia que marcó la vida de Ana Fernández

El pasado 7 de marzo se cumplió un nuevo aniversario de la partida de quien fuera el operario de cámara y novio de la actriz Ana Fernández, quien lo recuerda como cada año a través de sus redes.

Todos aquellos que han perdido a un ser querido saben que la vida sigue, irremediablemente, pero el dolor permanece y el tiempo nos enseña a lidiar con él; sin embargo el aniversario de la pérdida siempre remueve los recuerdos.

La actriz Ana Fernández vivió la muerte accidental de su novio Santi Trancho hace cinco años, cuando ella contaba con apenas 25 años. El dolor la arrolló completamente.

Y a partir de entonces, cada año Ana le hace una dedicatoria especial a Santi, con una corta frase que siempre logra expresar su afecto.

“Sigue grabando ángeles”, escribió en este quinto aniversario, al lado de una fotografía en blanco y negro donde Santi muestra su perfil mientras graba alguna escena a través de su cámara.

TRÁGICO ACCIDENTE DE SANTI TRANCHO

A

le gustaba vivir la vida al máximo, como si cada día fuera un regalo único que no estaba dispuesto a desperdiciar. Se desempeñaba como cámara de programas como “Frank de la Jungla”, “Callejeros”, “Fabricando” y el último proyecto en que trabajaba era “En tierra de nadie”, sobre el drama de los inmigrantes al llegar a USA.

A primeras horas de la tarde del día de su muerte, se desplazaba a gran velocidad en su motocicleta por una carretera de Madrid, en el límite del municipio Galapagar, y aparentemente intentó rebasar a un camión y perdió el control de su vehículo y de alguna manera, terminó atrapado debajo del pesado transporte.

Santi contaba para el momento de su muerte con 32 años, y según su madre su único defecto era su pasión por las motos.

LA VIDA SIGUE

Ana y Santi habían comenzado su relación en abril de 2012 y para el momento del accidente, vivían juntos en Las Rozas, con muchos planes de un futuro juntos.

Fueron meses muy duros para la joven actriz, quien tuvo la suerte de contar con el apoyo y amor de su familia y compañeros de trabajo. Ana se entregó a sus proyectos de trabajo entre otras cosas, y a finales del 2015 el amor volvió a tocar a su puerta.

Esta vez fue de la mano de un músico del grupo Marlon, Adrián Roma, quien supo entender el estado emocional de Ana y darle el espacio y el amor necesario para finalmente lograr establecer una linda relación que aún se mantiene.

“La vida me ha devuelto la alegría con una persona maravillosa, un músico impresionante. Estoy feliz porque me cuida mucho y eso que, para él, no ha sido fácil entrar de repente en mi vida con la situación que tenía, pero ha sido muy valiente”, explicó sinceramente Ana en una entrevista.