Fernando Martín: la estrella de la NBA que se convirtió en 'el hombre de vida' de Ana Obregón
El pasado 3 de diciembre se cumplieron 30 años del terrible accidente de tránsito que terminó con la vida del icónico jugador de baloncesto español, quien fuera el gran amor de Ana Obregón.
En sus 27 años de vida, Fernando Martín destacaba como jugador del Real Madrid y había logrado alcanzar el sueño de cualquier basquetbolista al ser fichado para un equipo de la NBA, convirtiéndose así en el primer español en lograr tal privilegio.
Pero un accidente de tránsito cuando se dirigía a presenciar un partido del Real Madrid en el que no podía jugar por molestias en su espalda, terminaría con su vida en forma inmediata.
El exceso de velocidad con el que se desplazaba provocó que perdiera el control de su vehículo e invadiera el carril del lado contrario, impactando de frente contra otro vehículo. El otro conductor se salvó, a pesar de quedar muy mal herido.
Para Ana Obregón, quien fue su pareja por cuatro años, este fue el final de la mayor ilusión de su vida. Fernando fue su gran amor, el hombre por quien abandonó sin arrepentimientos una prometedora carrera de actriz en Hollywood y con quien soñaba tener hijos.
En sus memorias “Así soy yo”, Ana le dedica un capítulo completo a su noviazgo con Fernando, con quien mantuvo una relación secreta debido al carácter discreto del jugador del Real Madrid.
“Estuvimos escondidos durante mucho tiempo porque a Fernando no le gustaba la fama”, explicó Ana a Bertín Osborne, según recoge la revista Hola.
Su relación se inició cuando Obregón intentaba forjarse una carrera como actriz en Hollywood, y al conocerse sintieron el clásico flechazo del que no pudieron librarse.
La leyenda del baloncesto no estaba cómoda con la idea de que Ana hiciera una carrera como actriz, y a pesar de que ella dejó una serie a punto de comenzar en Hollywood y se regresó para vivir los cuatro idílicos años de relación, la situación no dejó de traerles conflictos.
“Él no quería que fuera actriz. Cuando tuvo el accidente estábamos cabreados por eso. El día anterior discutimos y no le volví a ver. Me hubiese gustado decirle que seguía enamorada de él”, llegó a contar Ana, luego de la muerte de su pareja.
Cada año Ana recuerda con mucha nostalgia el fatídico día de su muerte, y en algunas oportunidades ha compartido a través de sus redes sociales una fotografía de él, rescatada de su baúl de los recuerdos, con alguna hermosa dedicatoria.