Rocío Flores cumple la promesa a sus hermanos David y Lola en Supervivientes, y les dedica un pez
Luego de varios intentos, Rocío consiguió el pez que le prometió a sus hermanos y aseguró que es el primero de muchos.
A casi dos meses de concurso, Rocío Flores estaba sumergida en un bajón emocional provocado por las circunstancias del concurso y la sonada ausencia de su madre, pero un pececito parece haberlo cambiado todo. Ahora la joven de 23 años le ha podido dedicar su logro a David y Lola, sus hermanos menores.
A LA TERCERA VA LA VENCIDA
Hace unos días, los supervivientes tuvieron la oportunidad de comunicarse con sus familiares y fue ahí donde Antonio David Flores aprovechó para transmitirle a Rocío que sus hermanos querían que ella les dedicara un pescado.
Aunque hasta el momento era la única que no había logrado hacerse con un pez, luego de varios intentos fallidos y de mucha perseverancia, alcanzó el objetivo.
Decidida a lograrlo, la influencer se metió al mar con José Antonio Avilés para conseguir comida para el grupo, y aunque al principio una piedra y un alga fueron las presas que picaron el anzuelo de la rubia, al tercer intento una sardina apareció en la punta de su sedal, provocando un estallido de emoción que de inmediato la puso a pensar en David y Lola.
"¡¡Se lo dedico a mis hermanos Lola y David!!", expresó Rocío, mostrándose muy emocionada.
EL PRIMERO DE MUCHOS
Sus nuevas habilidades de pescadora parecen haberla sacado de un espiral de depresión producto de unas semanas llenas de retos físicos y emocionales para ella. Ahora llena de ímpetu, la nieta de "La más grande" aseguró que pretende seguir practicando con ahínco para conseguir más comida.
"Es mi primer pez, pero no el último. Voy a seguir intentándolo. Quiero pescar más de aquí a que me vaya", recalcó llena de energía con un semblante mucho más vibrante.
EL DRAMA FAMILIAR LLEGÓ HASTA HONDURAS
Para nadie es secreto que Rocío ha estado pasando por momentos muy bajos, pues no solo su madre continúa ignorándola, Ana María Aldón también le demostrado su indiferencia al no defenderla de concursantes como Yiya, quien terminó siendo castigada por la producción del programa luego de llamarla "morsa", otra vez.
Esta pequeña victoria en la vida de la primogénita de Flores y Carrasco supone una necesaria bocanada de aire fresco que podría significar una importante diferencia para su concurso.