Abuela sale a tomar sol en plena cuarentena guardando el distanciamiento social
Una tierna abuelita uruguaya ha cautivado a los internautas cuando se hizo viral el momento de esparcimiento que buscó para ella misma durante el confinamiento. Lo ha hecho además con responsabilidad para mantener la distancia con otros.
En medio del confinamiento que cientos de países del mundo han ordenado a sus ciudadanos como medida preventiva ante la pandemia del coronavirus, una abuelita en Uruguay salió a tomar el sol y disfrutar de un mate.
Abuela se lava las manos. | Foto: Rawpixel
Mientras lo hacía fue capturada en una fotografía que rápidamente se popularizó en redes sociales gracias a un tuit publicado por la cuenta “Derecho en Zapatillas” junto al texto: “La amo. Mientras no se cause un perjuicio a tercero, legal! En Uruguay”.
Pero eso no fue todo lo que hizo. También se cercioró de que tomaba las medidas apropiadas y construyó un perímetro de seguridad alrededor de ella frente su vivienda.
Manos de ancianos. | Foto: Pixabay
La cerca que construyó con cintas que dicen “no pase” se ha convertido en toda una sensación en redes sociales, así como el propio gesto de salir a disfrutar de un momento para ella en medio de las circunstancias tan difíciles que vive el mundo.
Es que ella encontró una solución a su deseo de tomar aire libre y no fue todo lo que halló. Consiguió la admiración de muchos internautas que la elogiaron diciendo que “vive en el futuro”, mientras que otros afirmaban que ha dado una clase de defensa de derechos y propiedad privada.
Otros sin embargo la criticaron al considerarla una persona rebelde que no da ejemplo a otros ciudadanos. Ella no ha sido la única abuelita del mundo que ha encontrado planes seguros para su esparcimiento, a pesar del aislamiento social.
Esta es la romántica historia que comparten Inga Rasmussen y Karsten Tüchsen Hansen, de 85 y 89 años, respectivamente.
Inga y Karsten comparten en la frontera entre Alemania y Dinamarca. | Foto: YouTube/shz.de – Nachrichten aus Schleswig-Holstein
Ellos, aunque separados por la distancia, logran encontrar una manera de verse y mantenerse juntos. Sí, incluso en tiempos de confinamiento.
Ella vive en Dinamarca y él en Alemania. Cada día ambos se encuentran en la frontera de los dos países para compartir un bocadillo y conversar mientras toman algo. Hasta sus propias sillas han llevado para disfrutar del encuentro.
Cabe destacar que por las normas preventivas contra el COVID-19 la frontera entre ambos países se encuentra cerrada, pero eso no ha sido impedimento para los enamorados.
Inga y Karsten se conocieron hace dos años y desde ese entonces han sido completamente inseparables. Desde marzo de 2019 se han visto casi a diario.