Alba Carillo sobre su trauma después de "Supervivientes": 'Miedo de volver a la civilización'
A pocos días para terminar el programa de concursos “Supervivientes 2020”, Alba Carillo comparte cómo fue su experiencia cuando participó hace tres años, logrando llegar hasta la final.
Con la reciente expulsión de Elena Rodríguez del reality luego de permanecer 91 días en la isla de Honduras, la colaboradora de “Ya es mediodía” recordó lo vivido en 2017, cuando casualmente también permaneció esa cantidad de días en Cayos Cochinos.
"El último día es una pasada. Yo les estoy viendo como con ganas de marcharse y lo normal es al revés, que ya te acondicionas a todo. Ya tienes miedo de volver a la civilización", dijo la modelo.
En el set del programa, junto a sus compañeros Sonsoles Ónega y Miguel Ángel Nicolás, Alba compartía cómo fue volver a su hogar y a la cotidianidad, luego de tres meses luchando por sobrevivir en Honduras, donde apenas se visten, no usan calzado y duermen en el piso.
A tal nivel se acostumbró a las difíciles condiciones en que vivió durante esos 91 días, que al llegar a su casa el colchón se le hacía demasiado blando e incómodo, al punto que decidió cambiarlo por uno ortopédico. Más adelante se arrepentiría, descubriendo lo incómodo que es en el día a día.
A pesar de que la experiencia es en realidad muy dura, la convivencia con los compañeros es difícil, los conflictos son diarios, se extraña a la familia, la alimentación es bastante precaria y pare de contar, Alba hace énfasis en que fue una gran experiencia y se sintió muy afortunada por vivirla.
"La verdad es que es mágico. Van a venir cambiados. Y lo que decía el podólogo es verdad, les va a costar ponerse zapatos. A mí es una de las cosas que más me costó. Como te tiras ahí descalza, de repente vestirte y calzarte lo ves raro", explicó Carrillo.
Respecto a Elena y su gran cambio físico, Alba tuvo muchos elogios para ella, especialmente por el valor que demostró al final, cuando se despojó de sus ropas y se bañó completamente desnuda en el mar, dejando de lado su inseguridad por el peso perdido.