Cristina de Borbón cumple 55: una retrospectiva de los últimos años difíciles de la hermana del rey Felipe

El sábado 13 de junio la infanta Cristina cumplió 55 años. Desde que Felipe VI decidió retirarle el título de duquesa de Palma a su hermana, en 2015 y la víspera de su cumpleaños, la fecha parece haber quedado ensombrecida para siempre para ella.

Debido a que la infanta quedó envuelta en el escándalo alrededor del caso Nóos, hasta quedar imputada en la causa, su hermano el rey le solicitó que renunciara a sus derechos de sucesión al trono español. Ella, sin embargo, se negó.

SIN TÍTULO DE DUQUESA

Como represalia, Felipe VI decidió quitarle, en la víspera de su cumpleaños número 50, el título de duquesa de Palma que ostentaba.

En aquella causa en la que se la investigó por operaciones fraudulentas y delictivas realizadas desde el Instituto Nóos, que dirigía su esposo Iñaki Urdangarin, la infanta resultó absuelta. Sin embargo, nuevamente en la víspera de su cumpleaños, recibió otro duro golpe: la justicia condenó a su marido a cinco años y diez meses de prisión.

EL CUMPLEAÑOS EN 2020

Por tercer año consecutivo, este cumpleaños ha sido uno muy duro para la ex duquesa de Palma. Hasta marzo, ella esperaba celebrar esa fecha junto a su esposo y sus hijos. Pero, COVID-19 mediante, no ha podido ser.

Iñaki Urdangarin ya tiene habilitado un total de 36 días al año fuera de la cárcel de Brieva, en la que cumple su condena, y ya ha podido pasar la Navidad pasada junto a su familia. Sin embargo, en esta ocasión las restricciones impuestas para contener la pandemia lo han dejado momentáneamente privado de sus permisos.

Por su parte, Cristina de Borbón se encuentra actualmente con sus hijos en Suiza, y dadas las restricciones para el viaje no podrán tampoco visitarlo en España. De hecho, desde febrero que la familia no se reencuentra.

EL ESCÁNDALO DE DON JUAN CARLOS

El alejamiento entre Felipe VI y la infanta parece haberse visto afectado también por el escándalo reciente de la investigación que tuvo por objeto a don Juan Carlos, investigado por supuestas comisiones y por posibles delitos de blanqueo de capitales en Suiza.

En aquella oportunidad, Felipe VI aparecía como potencial beneficiario de las operaciones que podría haber realizado don Juan Carlos. Para desmarcarse del asunto, el rey anunció su renuncia a la herencia de su padre, y el retiro de su asignación.

Así, marcaba todavía más la distancia entre él, su esposa y sus hijos, por una parte, y todo el resto de la familia, es decir, las infantas sus hermanas, y los reyes eméritos por la otra. Las posibilidades de un acercamiento, en este momento, parecen muy bajas.