Ana María Aldón casi se ahoga en una piscina, y culpa a "Supervivientes 2020"
Ana María Aldón se pronunció mediante sus redes para contar un curioso incidente que le ocurrió al regresar de Honduras tras su paso por “Supervivientes”.
Semanas atrás, el guardia civil Jorge Pérez resultó el ganador del aclamado concurso de Mediaset, “Supervivientes 2020”, sorprendiendo a toda España y volviéndose uno de los ganadores más inesperado de todos.
Pero esto significó que Ana María Aldón quedara como segunda finalista. Y aunque llegó muy lejos en su concurso luego de 105 días de sudor y lágrimas, enorgulleció a su familia y su base y admiradores hasta el final.
LAS SECUELAS DE SU CONCURSO
Con la intención de cocinar un delicioso solomillo al whisky, la esposa de José Ortega Cano apareció en su cuenta de Instagram no solo enseñando la receta sino contando una anécdota que dio mucho de qué hablar.
En el directo de casi una hora de duración, Aldón -quien recibió decenas de comentarios de apoyo a medida que sus fans iban conectándose al Instagram Live- dijo con humor que no sabía para que se fue a Honduras, pues pasó hambre.
“A ocho mil kilómetros de aquí y nada más que he pasado hambre", reflexionó la madrastra de Gloria Camila.
Asimismo, recordó lo que le ocurrió días atrás al zambullirse en una piscina. Y es que parece que la costumbre de usar lentes de buceo en el mar de Honduras le hizo pasar un mal trago en esta oportunidad.
"No sé si os habéis enterado, pero es que resulta que me he tirado en una piscina con las gafas de bucear y casi me ahogo. No me lo puedo explicar", relató.
Luego, la explicación que le dieron la hizo tranquilizarse un poco, y es que en el mar, el agua salada permite que una persona con gafas flote con mucha facilidad.
"¿Tanto he engordado yo que me voy a hundir aquí en el agua? No me podía separar del borde de la piscina", recordó Aldón.
Habiendo pasado más de 100 días en la playa, la diseñadora aseguró que por ahora no tenía ganas de visitar el mar y que se encontraba muy cómoda en Madrid: “Sí me quiero ir para ver a mi gente: a mi hija, a mi nieta, a mi madre, a mi familia", contó.
Hasta hace poco, Ana todavía tenía las piernas marcadas por sus “heridas de guerra” de Honduras: picaduras de insectos y raspones que se hizo al pescar. La mujer de Ortega Cano también bajó de peso (casi 10 kg) a lo largo de las semanas que estuvo en Latinoamérica.