Alessandro Lequio intenta contener las lágrimas hablando de Ana Obregón y su difunto hijo Álex
A punto de las lágrimas ha estado el padre del fallecido Álex Lequio al ver un nostálgico programa dedicado a la vida de Ana Obregón, y ser invadido por los recuerdos.
Tras la emisión del primer programa especial de ‘Hormigas blancas’ sobre la vida de Ana Obregón, luego de nueve años fuera del aire, Alessandro Lequio ha tenido la oportunidad de verlo y le ha costado mucho manejar sus emociones.
"Yo estuve muy enamorado de Ana. El reportaje me despertó tantos recuerdos y emociones que no tengo capacidad para valorarlo, tampoco tengo ganas y nunca las tendré", dijo Lequio con lágrimas apenas contenidas.
Durante ‘El programa del verano’, donde Lequio es colaborador, su amigo Joaquín Prat se ha mostrado muy empático con él y con Ana, animándolos a seguir adelante con sus vidas, que aunque no volverán a ser las mismas sin su hijo en común, él así lo hubiese querido, porque era un ser especial y lleno de amor por la vida.
"Nosotros desde aquí vamos viendo el proceso de Alessandro de recuperar una vida (…) sigue viviendo porque tiene gente que le necesita, porque eso es lo que vuestro hijo querría", dijo Prat con cariño.
Y es que, como bien diría Obregón poco después de morir su único hijo de un cáncer agresivo a los 27 años el pasado 13 de mayo, ‘perder a un hijo es morir y tener la obligación de seguir viviendo’, y tanto ella como Alessandro intentan eso cada día.
En el documental sobre Ana, inevitablemente se mostraron fragmentos de la vida en común entre ella y Lequio, así como de su hijo cuando era un niño adorable, lleno de rizos dorados y siempre con una sonrisa que encantaba a todos.
El colaborador de ‘El programa del verano’ comentó que algunas de esas imágenes correspondían a la primera vez que apareció en televisión hace más de 30 años, cuando recién llegaba a España, y confesó sentir un poco de vergüenza al verlas pues le costaba reconocerse.
Por ahora, Alessandro se ha enfocado en su trabajo, en su familia y en vivir día a día con la conciencia plena de que su hijo ya no estará. De igual manera que lo intenta la madre de Álex, quien se ha refugiado en el amor y apoyo de su familia para seguir adelante.