Carmen Martínez Bordiú: amor y dramas en la vida de la aristócrata
La Duquesa de Franco ha ocupado su corazón con los nombres de muchos hombres, pero el dolor también llena un gran espacio en su interior.
Carmen Martínez Bordiú es una de las más populares aristócratas en España a la que muchos la ven como una frívola mujer, pero es una dama que ha sufrido y luchado mucho en la vida para que los golpes en su camino no la derrumben.
Amores y dramas han sido los protagonistas en los capítulos de su existencia. Se ha casado tres veces y tuvo otros tantos romances, pero sin duda lo más resaltante son las tragedias que han dejado una amarga huella: la muerte de su primogénito y la de su hijastra.
SU PRIMER MATRIMONIO
La nieta mayor del dictador español Francisco Franco se casó en marzo de 1972 con Alfonso de Borbón Dampierre con quien tuvo dos hijos, Francisco de Asís y Luis Alfonso.
El matrimonio de la aristócrata y el Duque de Cádiz duró solo diez años y tras su divorcio la custodia de sus dos hijos la recibió el nieto de los reyes Alfonso XIII y Victoria Eugenia.
A pesar de haberse separado de Alfonso, tras su muerte, siete años más tarde de haber terminado su matrimonio, Carmen demandó a los representantes del complejo de esquí en el que perdió la vida su ex, para que el único hijo vivo del matrimonio recibiera 3.6 millones de euros como indemnización.
Resulta que el Duque de Cádiz murió al sesgar su cuello por culpa de un empleado que levantaba un cartel en la estación de esquí de Beaver Creek en Colorado, Estados Unidos, justo en el momento que el personaje español descendía deslizándose en la nieve.
Martínez Bordiú consideró el abominable hecho como una negligencia que acabó con la vida del padre de su hijo y por eso demandó a los directivos del recinto. Tras la disputa legal recibió 600.000 euros destinados para los estudios y necesidades de Luis Alfonso, quien en aquel entonces tenía 15 años.
VEINTIDÓS AÑOS MAYOR
Su segundo matrimonio lo constituyó con Jean Mari Rossi a quien conoció después de su divorcio con el Duque de Cádiz y con quien se instaló en París. El nuevo amor de la nieta de Franco era un anticuario 22 años mayor que ella; un simpático seductor que conoció durante un viaje que realizó al país del romance con unos amigos.
Sin embargo, aquella unión también estaba destinada al fracaso. Además de no ser feliz por completo por la muerte de su primer hijo, meses más tarde de fallecer Francisco de Asís, murió de forma terrible una de las hijas del anticuario al caer en el mar y ser alcanzada por la hélice de una lancha.
El suceso ocurrido en Bahamas fue presenciado por Rossi y sus otros hijos. Sin duda esa desgracia cubrió de dolor una vez más el corazón de Carmen, quien se separó del francés en buenos términos.
SU AMOR ITALIANO
Luego apareció en su vida Roberto Federicci, un arquitecto italiano que pasó a ser su nueva pareja y quien le dio un giro importante en su vida.
La descendiente del dictador español se fue a vivir con su nuevo hombre a una finca en Sevilla y se dedicaron a las labores del campo y criar ovejas. Su relación duró casi nueve años hasta que una vez más la Duquesa de Franco rompió con Federicci.
Al italiano no le gustó para nada que ella lo dejara y tomó muy mal la ruptura de su noviazgo, sin embargo, jamás demostró que había resentimiento como sí lo hizo Alfonso.
Entre tanto, mientras Carmen se encontraba a sí misma, en medio de una etapa de baja moral, conoció a José Campos, un deportista 13 años menor que ella y quien era su polo opuesto, pero eso no fu impedimento para comenzar a su lado una nueva relación sentimental.
Junto a él se fue a vivir a Santander lugar donde aumentó unos cuantos kilos por no inhibirse de la gastronomía y la buena vida que había en dicho paraje.
José y Carmen decidieron casarse en el año 2006 pero su matrimonio alcanzó los siete años al decidir divorciarse. Con la separación el deportista quiso sacar su tajada de la situación, pero sus pretenciones económicas no se consumaron.
Carmen Martinez Bordiu asiste a la Feria de San Isidro en la Plaza de Toros de Las Ventas el 23 de mayo de 2018 en Madrid. | Foto: Getty Images.
LA TERCERA PERSONA
Se conoció que una tercera persona fue la causante de la ruptura de la nieta de Franco y José. Se trata de Luis Miguel Rodríguez, un millonario chatarrero español que se ha convertido en un personaje mediático.
‘Luismi’ ha sido el amor más enigmático de la duquesa pues siempre ha sido muy bueno con Carmen y su familia, pero nunca han dicho que son novios.
Al parecer el empresario está casado, aunque se dice que ya estaría en trámites legales para oficializar la ruptura de su matrimonio.
Carmen Martínez Bordiu llegando a las corridas de toros de La Goyesca. | Foto: Getty Images
Su supuesto noviazgo con Rodríguez sería su quinto intento de consolidar una relación amorosa, por lo que muchos se han preguntado si alcanzará la barrare de los siete años o la logrará superar.
Sin embargo, en una exclusiva para la revista ¡HOLA!, la aristócrata española habría revelado que su amorío llegó a su final y que está comenzando una nueva vida.
LAS TRAGEDIAS QUE ENLUTARON SU VIDA
Carmen fue calificada como una madre con mucho coraje al tener que lidiar con la muerte de su primer hijo, Francisco de Asís, quien falleció en un accidente de autos.
Sobre el hecho se puede mencionar que el chico iba con su padre y su hermano a bordo de un auto mientras regresaban de un viaje para esquiar, cuando el Duque de Cádiz se estrelló contra un camión en Navarra.
En el hecho falleció el joven de 12 años de edad y resultó severamente herido su progenitor quien pasó un buen tiempo hospitalizado mientras se llevaba a cabo su recuperación.
Carmen Martínez Bordiú en Madrid, España. | Foto: Getty Images.
En el entierro de su hijo Carmen no se llegó a quebrar en ningún momento y por el contrario, mostró una firme entereza a pesar del dolor en su corazón.
La nieta de Francisco Franco ha tenido una vida singular que también se enlutó con la muerte de su hijastra, la hija del anticuario francés con el que se casó.
A pesar de ser la descendiente de un dictador y represor de libertadores políticas, ella eligió vivir de forma libre y nadie ha roto nunca su forma de llevar su existencia.