Alfredo Adame quiere reconciliarse con los hijos que humilló, por sentirse "solo como un perro"
El actor dice haber dado un giro a su vida, aprendiendo a soltar aquello que le hacía daño y encontrando la felicidad. Ahora está dispuesto a retomar la relación con sus hijos.
Los escándalos en la vida de Alfredo Adame comenzaron a raíz de la separación de su matrimonio de 25 años con Mary Paz Banquells. Pero llegaron a su punto máximo cuando rompió relación con los tres hijos de ambos, argumentando que lo dejaron “solo como un perro”.
El distanciamiento con su familia inició con su hijo mayor Diego, de quien se apartó en 2019 luego de que el joven de 29 años lo etiquetara como una persona tóxica.
Posteriormente, su hijo menor de 21 años, Sebastián, compartió con Alfredo su inclinación sexual, a lo que su padre le pidió entre otras cosas que no lo hiciera público y que eliminara evidencias que pudieran llevar a los medios a inferir la verdad.
Esto generó un enfrentamiento entre ambos, al que se sumó en un gesto de solidaridad el hermano del medio, Alejandro, de 27 años. Finalmente, Adame rompió relación con ellos y públicamente declaró que intentaría quitarles el apellido, que no los volvería a ayudar económicamente y que no los quería ni necesitaba en su vida.
HOMBRE NUEVO
A pocos meses de esta explosión totalmente mediática, Adame dice haberse olvidado de todo lo malo que ocurrió.
“Apreté el botón de borrado total, estoy viviendo otra vida, con otra mentalidad, con otra forma de ser, sin rencores”, dijo el actor mexicano.
Reconvertido luego de encontrar su paz interior, Adame siente que es el momento de volver a abrir la puerta de su vida a sus hijos, para dar inicio a una relación completamente nueva.
Alfredo dejó muy en claro que no considera que debe disculparse, porque su consciencia está limpia y no se arrepiente de nada. Por el contrario, está muy convencido de que le dio todo a sus hijos, desde la vida, hasta el amor y el apoyo económico.
El actor tampoco espera que sus hijos le pidan perdón por lo que pudieron decir o hacer, pero eso sí: “nada más que ya cambié las condiciones: si me van a buscar, no es para que sea su chequera o su banco, porque fueron años de solo estarme sacando dinero”.
Así que Alfredo abre nuevamente las puertas de su hogar para los hijos que tuvo con Mary Paz, pero ellos deben demostrarle que están libres de malas influencias, y que el amor que sienten por él es genuino.