30 años de la muerte de Luis Gómez-Acebo: Simoneta recuerda a su padre, el vizconde de la Torre

A diferencia de la relación entre Juan Carlos I y Sofía, el amor entre Pilar y su esposo era palpable. Muchos los consideraron como una pareja ideal.

El 9 de marzo de 1991, Luis Gómez-Acebo dejó un gran vacío el corazón de su mujer y de sus hijos, cuando falleció a los 56 años de edad tras padecer cáncer linfático.

Su partida marcó el final de una historia de amor que comenzó en 1965 cuando él y la infanta Pilar se conocieron en la casa del rey Simeón. La conexión entre ellos fue tan contundente, que la hermana de Juan Carlos I renunció a sus derechos dinásticos para poder casarse con él.

UN HOMBRE IDEAL

Luis fue considerado el hombre de ideal de la infanta Pilar por la mayoría de quienes fueron testigos del amor que surgió entre ellos. Sin embargo, el conde de Barcelona no estuvo de acuerdo con la relación porque quería que ella se casara con el Balduino de Bélgica.

Pese a las dificultades, el 5 de mayo de 1967, Luis y Pilar contrajeron matrimonio en el monasterio de los Jerónimos de Belem en Lisboa. Al poco tiempo trajeron al mundo a Simoneta, quien en el aniversario 30 del fallecimiento de su padre, quiso recordarlo con mucho amor.

LA INTEGRIDAD ERA SU INSIGNIA

“Era una persona íntegra, generosa, divertida y con gran inteligencia que se nos fue demasiado pronto”, expresó la primogénita del vizconde de la Torre, según reseñó Vanitatis.

La definición que Simoneta tiene de su padre se parece mucho a la que José Luis de Villalonga ha expresado sobre el vizconde que supo llevar de manera excelente su rol como esposo de la infanta española. Manteniendo siempre la educación y el respeto por delante.

ERA EJEMPLO DE DIGNIDAD

"Era la educación personificada. Nunca le vi un mal gesto. (...) A diferencia de lo que le sucedió al rey Juan Carlos con doña Sofía, ellos se quisieron mucho y fueron muy felices", apuntó Villalonga, de acuerdo al reporte de Vanitatis.

Por su parte, Pilar no ocultó el amor por el padre de sus cinco hijos, al cual definió en varias ocasiones como "un ejemplo de dignidad y entereza".

UN HOMBRE DE NEGOCIOS

Además de ser el compañero idóneo para la difunta Doña Pilar, Luis también fue un hombre de negocios que destacó por sus excelentes decisiones comerciales. Uno de sus más grandes éxitos fue conectar la industria española con empresas internacionales.

Tras su paso contundente paso por Nueva York, Luis fue presidente del Consejo de Administración de Phillips Ibérica, de la Real Fundación de Música de Cámara y consejero de muchas compañías que gozaron de un éxito arrollador mientras mantuvo dichos cargos.

FUE PIONERO

Gómez-Acebo fue el responsable de llevar a España la colección Thyssen, gracias a la estrecha relación que mantuvo con el barón Thyssen. Incluso, fue el padrino de Borja, hijo del barón con Carmen Cervera.

Con un carisma avasallante, una inteligencia envidiable y un corazón enorme, Luis dejó en enorme vacío en su familia. Se dice que tras su muerte Doña Pilar quedó hundida en una tristeza tan profunda, que se desconoce si alguna vez logró superarla.