Historia del día: una mujer se niega a aceptar a un amigo gay después de que lo echaron de la casa
Amanda se negó a acoger a su amigo Miguel después de que lo echaran de la casa, y ahora sus amigos están molestos con ella porque él no tendrá hogar.
Esta historia comienza varios meses antes de que ella se negara a alojarlo. Amanda había permitido que Miguel viviera con ella cuando sus padres lo echaron por primera vez después de que él salió del clóset.
Mujer con mirada de preocupación. │Foto: Freepik
LE TENDIÓ UNA MANO
Después de ser expulsado por sus padres, Miguel se quedó con uno de sus hermanos durante ocho meses, pero desafortunadamente, eso no funcionó. Amanda se sintió empatía por su amigo y le ofreció su sofá.
Al principio, a Amanda le encantaba tener a Miguel cerca, era muy divertido y se lo pasaron muy bien juntos. Él no tenía trabajo, así que Amanda solo le pidió que la ayudara a mantener limpio su apartamento y con la comida.
LAS COSAS SE SALIERON DE CONTROL
Sin embargo, el joven no colaboraba con la limpieza del hogar a menos que Amanda se lo suplicara. Ella estaba empezando a quedarse sin dinero, ya que él se comía toda la comida que ella compraba para la semana sin aportar nada.
Cuando ella le pedía que comprara comida, decía que lo haría, pero luego solo compraba una comida para él. Por suerte, cuando empezó a sentirse realmente frustrada con él, Miguel se mudó con su novio. Su relación nunca fue la misma, pero siguieron frecuentando el mismo grupo de amigos.
VOLVIÓ A ELLA
Con el paso del tiempo, Miguel y su novio se separaron. En el proceso de recuperar su bienestar emocional, el joven se quedó algunas noches con diferentes amigos, pero finalmente, se volvió al apartamento de Amanda.
Le preguntó si podía volver a vivir con ella, y esta vez le prometió que ayudaría y contribuiría más a limpiar, cocinar y ayudar a pagar la comida. Amanda quería creerle, pero no podía.
Hombre con expresión de preocupación. │Foto: Freepik
NO PUDO ACOGERLO
La última visita de Miguel hizo un gran agujero en su presupuesto de la joven que para el momento estaba en plena recuperación económica.
Ella le dijo que no y le explicó por qué. Estaba molesto, al igual que todos sus amigos, quienes siguen muy enojados con ella porque Miguel se quedará sin hogar sin un lugar donde quedarse.
Aunque ella sigue sintiéndose mal, pero no está dispuesta a tenerlo otra vez bajo el mismo techo ¿Hizo ella lo correcto? ¿Debería haberlo dejado quedarse con ella de nuevo después de la última vez? Si te gustó esta historia, sigue leyendo aquí.