Padre acusado de dejar a su hijo autista de 8 años congelarse hasta la muerte, rompe en llanto en la corte

El expolicía dijo al 911 que estaba haciéndole reanimación cardiopulmonar a su hijo por un supuesto golpe en la cabeza que nunca existió.

Thomas Valva murió por hipotermia en el garaje de su padre, quien fue arrestado por el incidente. El pasado 11 de mayo el hombre tuvo una audiencia en la que no pudo contener las lágrimas al escuchar sus propias palabras.

SE QUEBRÓ EN LLANTO

Tras la muerte del niño, el exoficial del Departamento de Policía de Nueva York fue arrestado junto a su prometida, Angela Pollina. Ambos fueron acusados de asesinato en segundo grado y de ser declarados culpables podrían enfrentar hasta 25 años de prisión.

Cuando compareció ante la Corte Suprema del Condado de Suffolk, Michael, de 41 años, rompió en llanto al escuchar la llamada que hizo al 911 el pasado 17 de enero, mientras supuestamente trataba de reanimar a su hijo con autismo.

NO DIJO LA VERDAD

En el audio de la llamada, se puede escuchar a Valva diciendo al operador que estaba haciéndole RCP al niño porque este había sufrido una caída mientras corría hacia el autobús escolar.

"No sé si está respirando o no. Su corazón se detuvo. Se golpeó la cabeza", dijo el padre de tres en la llamada.

MANTUVO SU VERSIÓN

Cuando los paramédicos llegaron a la casa de Michael, lo encontraron tratando de reanimar al niño en el sótano de la casa. Manteniendo su coartada, el exoficial les repitió que el niño estaba bien hasta que se golpeó la cabeza. Incluso señaló que lo había bañado y vestido.

Sin embargo, la fiscalía asegura que el pequeño era constantemente abusado física y psicológicamente. Según afirmaron, Thomas era forzado a dormir en el garaje sin mantas ni calefacción, con una temperatura que estaba por debajo de siete grados centígrados.

ERAN CASTIGOS

De acuerdo a uno de los hermanos de Thomas, el niño era castigado por su padre con regularidad. El fiscal del distrito condenó la actitud de Michael y su prometida ante los niños.

"La pareja no mostró ningún respeto por la vida humana de este niño", argumentó Timothy Sini, según recoge El Mundo.

A la espera de un veredicto, los otros dos hijos de Valva fueron puestos bajo la custodia de la madre. Por su parte, las gemelas de Pollina quedaron al cuidado del padre.

Los acusados se han declarado inocentes de los cargos que se les están imputando, a pesar de las contundentes pruebas en su contra.