El misterio de la desaparición de una pareja abandonada entre tiburones en el océano

El joven matrimonio quedó a la deriva tras ser abandonado por la tripulación del barco en el que viajaba cuando decidió visitar la Gran Barrera de Coral en Australia.

Tom y Eileen Lonergan fueron vistos por última vez hace 23 años cuando buceaban alrededor de las 3 pm durante un viaje del barco turístico Outer Edge, a 64 kilómetros de la costa de Queensland, en Australia.

Hoy todavía no hay señales de la pareja estadounidense que llegó en enero de 1998 a Port Douglas en el norte del país-continente, en busca de aventuras. Sigue leyendo para conocer más detalles de su desaparición.

UN TERRIBLE DESTINO

Lo que la pareja encontró en su viaje fue muy diferente a lo que esperaba. La tripulación del barco de buceo donde viajaban se olvidó del matrimonio.

Tom y Eileen fueron abandonados para sufrir un terrible destino en aguas infestadas de tiburones. No se sabe si murieron ahogados o devorados. Su historia sirvió como inspiración para la película ‘Open Water’ de 2003.

Para la fecha de su desaparición, tenían 10 años casados. Se conocieron cuando estudiaban en la universidad. A ella le apasionaba el buceo, un interés que Tom no tardó en adoptar.

Los Lonergan habían decidido visitar la Gran Barrera de Coral después de pasar dos años sirviendo con el Cuerpo de Paz de Estados Unidos en Tuvalu y Fiji.

En la costa de Queensland frecuentemente se observan enormes tiburones que pueden medir cinco metros de longitud. Contra la aterradora especie, el destino de la pareja quedaría sellado.

La última vez que Tom y Eileen fueron vistos estaban nadando a 12 metros bajo el mar, cuando exploraban el famoso ecosistema oceánico. Casi una hora después, los Lonergan resurgieron para volver al barco, pero no estaba a la vista.

La embarcación había regresado a Port Douglas sin dos de sus pasajeros. Nadie notó que la pareja no estaba sino hasta dos días después. Jack Nairn, propietario del Outer Edge, encontró la bolsa de buceo del matrimonio que contenía sus papeles y su billetera.

Las autoridades no tardaron en iniciar la búsqueda de la pareja, pero no tuvieron suerte. Sin embargo, en los siguientes meses comenzaron a aparecer algunos rastros sobre su destino.

Según reseñó Daily Star, las autoridades encontraron un traje de neopreno sin sangre de la talla de Eileen. También hallaron chaquetas de buceo inflables con los nombres de la pareja.

Seis meses después, encontraron una lista de inmersiones que databa de la mañana siguiente a la desaparición del matrimonio. A continuación, puedes leer el trágico mensaje que tenía escrito.

EL TRÁGICO MENSAJE

Aterrados, Tom y Eileen habían dejado un mensaje escrito en la lista de inmersiones hallada por las autoridades meses después de su desaparición:

“A cualquiera que pueda ayudarnos: la embarcación Outer Edge nos abandonó en el arrecife de la corte el 25 de enero de 98 a las 15:00 horas. Por favor, rescátennos antes de que muramos. ¡Ayuda !”, decía la nota, según reseñó el medio.

Esta evidencia sugirió que la pareja no perdió la vida por ataque de tiburones. Sin embargo, para aquel entonces, las esperanzas de encontrarla se estaba desvaneciendo.

La desaparición de los Lonergan se había convertido en un intrincado incidente internacional entre Estados Unidos y Australia. Los abogados del barco turístico donde navegaban sugirieron que Tom y Eileen habían desaparecido a propósito.

Otra posibilidad que se manejaba era un asesinato-suicidio por parte de Tom. Esto se debe a que, dos semanas antes de su viaje, Eileen había incluido en su diario una inquietante afirmación. Para conocer más detalles del suceso sigue con AmoMama.

EL MENSAJE EN EL DIARIO DE EILEEN

Ella había escrito que su esposo tenía un “deseo de muerte”. Aunque había afirmado en el texto que él no era suicida, dijo que esperaba tener una pronta muerte, rápida e indolora.

Tras plantearse esta teoría, los parientes del matrimonio la descartaron señalando que era calumniosa y extravagante. En última instancia Jack Nairn, propietario del Outer Edge, fue responsabilizado y declarado culpable de negligencia.

“El patrón debe estar atento a la seguridad de los pasajeros y garantizar que se lleven a cabo las medidas de seguridad”, dijo el forense Noel Nunan, en sus comentarios finales de la investigación.

Agregó que, un jurado razonable declararía a Nairn culpable de homicidio involuntario. Sin embargo, fue declarado inocente por el jurado, pero su compañía turística cerró.

El escándalo por el incidente también provocó un cambio de ley en Queensland. Ahora, los patrones de botes de buceo deben asegurarse de que todos los buzos a bordo en todo momento.