1.000 motociclistas se presentan al funeral de un niño de 2 años que murió en inundaciones
La trágica muerte de Kellen Vaughn, un niño de dos años, movilizó los corazones de Estados Unidos. Unos 1000 motociclistas se presentaron como voluntarios para despedirlo.
Kellen Burrough-Vaughn era un niño feliz de Tennessee. Vivía con sus padres y cuatro hermanitos en el condado de Humphrey.
Sus familiares lo recuerdan como un niño que siempre estaba sonriente y cuyos enojos nunca parecían durar. Y a su tierna edad, el pequeño tenía pasión por las motocicletas.
Siempre que escuchaba el familiar ruido de una moto, se volvía para mirar, feliz. Allen Burrow, su abuelo, cuenta que esa era una pasión que había heredado de él.
El pequeño fue lamentablemente una de las víctimas de la inundación repentina que afectó su hogar. "En un momento había un poco de agua que entraba por la puerta, y casi de inmediato la corriente era tal que echó la puerta abajo", contó Chris Hixson, el otro abuelo del niño.
"Él dormía en un cuarto trasero y no pudieron alcanzarlo a tiempo", agregó. Tras varios días desaparecido, su cuerpo finalmente fue encontrado, y la familia se preparó para lo más difícil: la despedida.
La idea de homenajearlo con un desfile de motocicletas fue de su abuelo Allen. La familia hizo entonces un llamado a la comunidad de motociclistas pidiendo voluntarios que montaran sus vehículos en el funeral.
La expectativa de la familia era que, con suerte, se presentarían unas 75 a 100 personas. Sin embargo, la historia del pequeño amante de las motocicletas fallecido en tan trágicas circunstancias conmovió a mucha más gente.
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Alrededor de 1.000 motociclistas se presentaron para prestar el último adiós a Kellen. En redes sociales, algunos asistentes al evento publicaron imágenes que son dignas de asombro.
El youtuber Biker Dad subió un video en el que se puede apreciar la interminable procesión. Muestra el momento en que se larga la procesión: más de 15 minutos después, cuando el video termina, las motos nunca dejan de pasar.
El motociclista Ben Capps, otro de los asistentes, publicó en su cuenta de Instagram (@biker_ben) algunas imágenes alrededor del evento. En ellas se aprecia la inmensa cantidad de personas y motocicletas reunidas, ocupando cada resquicio libre de la localidad.
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Nada puede traer al pequeño Kellen de regreso. Pero el calor de su memorable despedida es señal de que nunca será olvidado.
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