Niña nació de un embrión que estuvo congelado durante 27 años

Una bebé rompió un récord mundial al nacer de un embrión que había estado congelado casi tres décadas. Sus padres se sorprendieron con la noticia; aunque para ellos se trata de mucho más que un impresionante récord.

Si bien Molly Gibson nació en 2020, estaba lista para llegar al mundo desde 1992. El embrión de la niña fue congelado hace 27 años, y el año pasado fue adoptado. Los orgullosos padres son los residentes de Tennessee, Estados Unidos, Tina y Ben Gibson.

El exitoso nacimiento de Molly de un embrión congelado por tanto tiempo rompió el récord establecido por su hermana Emma, quien esperó por 24 años a una pareja que anhelara convertirse en sus padres.

MUCHA SUERTE

Después de cinco años de infertilidad, Tina y Ben buscaron tener un bebé a través de un método alternativo. Usar un embrión fue su opción preferida, y Tina todavía está abrumada por la suerte que tuvieron.

La madre habló de la gran emoción que la embargaba: “Todavía me abruma. Si me hubieran dicho hace cinco años que no solo tendría una niña, sino dos, habría dicho que estaban locos”, cita BBC.

La increíble expansión de su familia fue posible gracias a la adopción de embriones. La pareja supo que existía esa opción gracias a un programa de televisión.

Al explicar por qué llevaron su historia a los medios, Ben y Tina tienen una respuesta simple. Esperan que su experiencia ayude y le dé esperanza a otros padres que están luchando por tener hijos.

CENTRO DE DONACIONES

La pareja está agradecida con el Centro Nacional de Donación de Embriones. La organización sin fines de lucro mantiene embriones congelados que fueron descartados por pacientes que recibieron fertilización in vitro.

Los Gibson dieron la bienvenida a un bebé que no está genéticamente relacionado con ellos. Según el centro de donación, más de un millón de embriones humanos no utilizados se almacenan en Estados Unidos, lo que puede ayudar a padres con problemas de fertilidad.

Mark Mellinger, director del establecimiento, admitió que la infertilidad es un problema frecuente: “Nos sentimos honrados y privilegiados de hacer este trabajo”.

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El centro de donación ha logrado más de 1.000 nacimientos y adopciones de embriones. Se cree que facilitan unos 200 procedimientos cada año. Los padres pueden decidir si les gustaría un proceso abierto o cerrado.

FORMANDO LA FAMILIA

Si optan por la adopción abierta, puede haber comunicación con la familia que donó el embrión. Mellinger explicó que las parejas pueden elegir entre cientos de perfiles de donantes que indican varios factores, como el historial demográfico.

A Ben y Tina no les importaba la apariencia de su futuro hijo. La madre dijo: “Mi esposo y yo somos personas algo pequeñas, así que lo escogimos por altura y peso y buscamos algo similar a nosotros”.

Los embriones de sus niñas, ​​que son hermanas genéticas, fueron congelados juntos en 1992. Emma nació en 2017, y tres años después llegó Molly, completando la feliz familia.

Ahora, las niñas son inseparables y sus padres están agradecidos y más felices que nunca. Aunque los mantienen despiertos toda la noche, Tina expresó que era “el mejor tipo de agotamiento” y que no lo cambiaría por nada.

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