Hermano cumple el último deseo de su hermana al invitarla al baile de graduación: dos días después, ella muere

Una chica compartió momentos maravillosos con su amada familia antes de convertirse en ángel. Sus seres queridos no la tuvieron por mucho tiempo, pero crearon los recuerdos que ella quería.

A una edad más temprana, los hermanos rivalizan entre sí. Ya sean todos niñas, niños o ambos, mayores o menores, los hermanos siempre se pelean por las cosas.

Pero a medida que crecen, a menudo están dispuestos a protegerse mutuamente de manera más intencional. Se vuelven leales y los mayores protegen a los más jóvenes. Esto sucedió con una familia de Denver, Colorado.

LE DIAGNOSTICARON UNA ENFERMEDAD RARA

La familia Aguilera incluía un hijo y una hija. Su hijo, Josh, era unos años mayor que su hermana, Janea. Todo parecía perfectamente normal hasta que ella cumplió 12 años. Entonces, a la jovencita le diagnosticaron una rara enfermedad.

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Vivió dos años más hasta su prematura muerte en 2014. Aunque este fue un golpe devastador para la familia y todo el vecindario, Janea murió como una niña feliz, pues su deseo de ir al baile de graduación se hizo realidad.

Janea siempre había sido una niña enérgica y feliz, y eso facilitaba que sus vecinos se relacionaran con ella. Vivía en un pequeño pueblo con su familia y la habían apodado la bebé del primer milenio nacida en el pueblo del sureste de Colorado conocido como Lamar.

En 2012, le diagnosticaron osteosarcoma, un tipo raro de cáncer. Sin previo aviso, la enfermedad se apresuró a atacar sus órganos vitales. Antes de eso, una de sus piernas había sido amputada.

SU DIAGNÓSTICO UNIÓ A LA COMUNIDAD

La gente de Lamar se solidarizó con Janea y decidió ser su faro de esperanza. Entonces los vecinos ataron cintas amarillas por el pueblo.

“Nos enorgullecía decir: ‘Soy de Lamar’”, admitió la prima de Janea. La familia Aguilera apreció la amabilidad; eso incluso trajo una sonrisa a la cara de la chica.

TENÍA UN ÚLTIMO DESEO

Después de su diagnóstico, a Janea se le programaron varias visitas al médico y se mantuvo relativamente sana durante dos años. Luego, lamentablemente, en 2014, su enfermedad se agravó.

Esto no se sentía como la enfermedad habitual, ni como algo que hubiera experimentado alguna vez. La chica, que era alumna de octavo grado, se dio cuenta de que le quedaba poco tiempo de vida.

Entonces hizo una lista de deseos. Ir a un baile de graduación era el número uno. Josh vio la lista de su hermana y le preguntó si quería ser su cita para su baile de graduación.

“Dijo: ‘Dios mío, ¿hablas en serio?’. Luego ella comenzó a llorar. Y, por supuesto, eso me afectó y también comencé a llorar”, afirmó el hermano mayor de la jovencita.

CUMPLIÓ EL DESEO DE SU HERMANA

Nadie hubiera esperado a una estudiante de octavo grado en una fiesta de graduación, pero Josh quería cumplir el deseo de su hermana.

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Después de obtener el permiso de la escuela y algunos preparativos de su familia, Janea se unió a su hermano para la gran noche.

Los dos llegaron con elegantes atuendos. Josh se veía elegante con un esmoquin negro, mientras que su hermana se veía asombrosamente hermosa con un vestido rojo sin tirantes.

Otros asistentes aplaudían a los hermanos por su valentía, pero el aspecto más notable de la noche soñada de Janea fue ¡ser coronada reina del baile!

La familia y los amigos estuvieron presentes para celebrar con la cordial joven que mostró sonrisas contagiosas durante toda la noche.

DOS DÍAS DESPUÉS

Janea tuvo una experiencia memorable en el baile de graduación un sábado por la noche. Terminó el día sintiéndose increíble, pero no sabía que le quedaban menos de dos días con sus seres queridos.

Un lunes de la semana siguiente, ella murió. La chica tenía 14 años en ese momento, pero mostró una fuerza increíble al vivir de manera positiva y nunca sentir autocompasión. En cambio, quería disfrutar de sus últimos días.

Los Aguilera organizaron una ceremonia de entierro para su preciosa hija. Familiares, amigos y vecinos llenaron el auditorio para presentar sus últimos respetos.

SERÁ RECORDADA POR SIEMPRE

La muerte de Janea no significó que su familia dejaría de lado aquello por lo que ella vivía. Continuaron apreciando los preciosos momentos que compartieron con su hija.

En 2018, su madre, Melony Schwartz, quien estaba celebrando el mes del cáncer infantil, compartió una historia edificante sobre cómo los amigos de su hija la honraron durante la graduación.

Compartió imágenes en Facebook con un grupo de estudiantes vestidos con togas de graduación. Habían visitado la tumba de Janea y posaron junto a su lápida.

“¡Estos chicos siempre estaban creando conciencia sobre cómo la honraban! A lo largo de sus años de escuela secundaria, siempre la recordaron y la honraron de múltiples maneras”, compartió la madre.

Y

: “¡Lo mejor de todo fue su graduación! ¡La mitad de la clase se presentó en el cementerio para tomarse una foto con nuestra niña!”.

Los estudiantes colocaron una silla vacía para su amiga ausente y la decoraron con una imagen impresa de ella. Luego se pusieron cintas amarillas en sus túnicas.

Durante su discurso, el valedictorian de la clase, uno de los mejores amigos de Janea, mencionó su nombre. La publicación de Melony consistió en una nota de agradecimiento.

“¡Gracias a todos por ayudar siempre a honrarla y difundir la conciencia!”, escribió la madre.

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A pesar de lo que parece un final triste para Janea, ella vivió una vida plena, consiguiendo lo que deseaba. Adicionalmente, su familia, amigos y vecinos se mostraron compasivos hasta el final. ¡Así es el verdadero amor!