Abuela de 85 años nunca había visto una montaña, así que su nieto la llevó a los 63 parques nacionales de EEUU

Después de no hablar con su abuela durante diez años, un joven de Washington D.C., Estados Unidos, decidió explorar 63 parques nacionales de su país con ella. Llevó a la mujer de 85 años a una aventura llena de diversión, luego de que ella le dijera que nunca había visto una montaña.

A menudo, las personas cortan los lazos con los miembros de su familia por varias razones, que van desde pequeños malentendidos hasta grandes conflictos familiares. Una vez que esto sucede, las personas rara vez se reconcilian con sus seres queridos. Después de años sin contacto, disculparse con alguien requiere mucho coraje.

El hombre de esta historia pasó por esa experiencia cuando su relación con su abuela se deterioró después de un evento importante en la vida. Sin embargo, diez años después, volvió a hablar con ella y emprendieron una aventura inolvidable que llamó la atención de los medios.

La separación inesperada

Cuando Brad Ryan era un niño pequeño, disfrutaba de la atención exclusiva de su abuela Joy Ryan. No había un día en el que Brad no pasara tiempo con su abuela paterna en su casa de Duncan Falls, Ohio. Recordó que exploraba la naturaleza y atrapaba ranas con ella.

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Si bien el pequeño Brad siempre quiso disfrutar de la compañía de su amada abuela, el destino tenía otros planes. En 2001, sus padres se divorciaron y tuvo que vivir con su madre en un lugar diferente. Recordó cómo afectó su relación con su abuela:

"Partió a nuestra familia en dos. No hablé con ella durante diez años".

La primera mirada

Diez años después, Brad estaba en la boda de su hermana cuando sintió reavivar su amor por su abuela. La primera mirada hacia ella hizo que todos los recuerdos de la infancia regresaran. En ese momento, supo que tenía que enmendar su relación con ella.

Los últimos diez años no fueron los mejores para Joy. Ella había luchado contra la leucemia y experimentó neumonía recurrente durante la enfermedad.

Después de la boda de su hermana, Brad llamó a Joy y la invitó a su casa para que le enseñara a hornear pan de plátano. Brad confesó:

“Fue incómodo al principio cuando te pierdes una década de la vida de alguien”.

Su confesión

Brad y Joy comenzaron su relación desde cero, dando un paso a la vez para reconstruir su confianza. Mientras reparaban su relación rota, la abuela y su nieto hablaron sobre la naturaleza. Fue entonces cuando Brad descubrió que Joy nunca había visto una montaña.

Ella dijo: "Es una pena que no pude ver más de eso en mi vida. Nunca tuve la oportunidad de hacerlo".

Como Brad sabía que su abuela era una gran fanática de la naturaleza, se dio cuenta de que se estaba perdiendo de muchas cosas. Sabía que tenía que hacer algo al respecto antes de que fuera demasiado tarde, así que decidió mostrarle las montañas, los océanos, los desiertos y todos los demás paisajes hermosos que nunca había visto.

La primera experiencia

En septiembre de 2015, Brad llevó a su amada abuela al Parque Nacional Great Smoky Mountains. Pagó todo el viaje mientras cursaba el último año de la facultad de veterinaria. En ese momento, el nieto y su abuela no tenían idea de que esto no era algo de una sola vez. Brad recordó:

"Ella no solo vio montañas, sino que escaló montañas conmigo. Incluso cuando llovía a cántaros, ella sonreía".

Después de visitar un parque nacional con Joy por primera vez, Brad se dio cuenta de que ella no era la abuela "típica". La consideró una superheroína al presenciar su increíble fuerza. Sabía que ella era extraordinaria porque no era fácil para las personas mayores escalar montañas.

El proceso de curación

Su primera aventura fue un gran éxito. En el proceso, Brad se dio cuenta de que su abuela lo había ayudado a sanar mentalmente. Antes del viaje, no estaba en su mejor estado mental, pero explorar la naturaleza con Joy lo hizo sentir feliz. Él dijo:

"Estaba tratando de hacer algo para ayudarla, y ella terminó salvándome en el proceso".

Brad y Joy sabían que querían vivir esas aventuras con más frecuencia, pero no tenían suficiente dinero. Brad creó una página de GoFundMe para recaudar fondos y usó el dinero para patrocinar su viaje de 28 días de 2017 a 21 parques nacionales.

Viajes increíbles

Su viaje de 28 días no fue solo para caminar, observar animales y adorar las maravillas de la naturaleza. También fue el comienzo de conversaciones difíciles y de aclarar malentendidos que los habían mantenido separados durante diez años.

En 2018, fueron al Parque Nacional Cuyahoga Valley de Ohio y exploró algunos parques más ese mismo año. Al año siguiente, Brad se sintió cómodo compartiendo su viaje con el mundo, por lo que comenzó a documentar sus expediciones en Instagram.

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Con cada nuevo viaje por carretera, Brad y Joy ganaron más popularidad, y pronto, las empresas comenzaron a ofrecerles viajes patrocinados. Algunas almas bondadosas también les habían ofrecido a Brad y Joy quedarse en sus casas después de ver su historia en las noticias locales.

Mejores amigos de por vida

Si bien Joy inspiró a la gente al demostrar que nada era imposible, se convirtió en la mejor amiga de su nieto. El objetivo de ellos era explorar todos los parques nacionales del país. En 2021, Brad y Joy recorrieron los parques nacionales de Alaska, donde uno de los deseos de Joy se hizo realidad.

La abuela quería presenciar a los osos cazando peces, y finalmente lo vio en uno de los parques nacionales. Después de su último viaje, solo tienen un parque más por visitar antes de afirmar que han recorrido los 63 existentes en Estados Unidos.

Brad y Joy admitieron que explorar su último parque nacional sería una experiencia emotiva. Habían trabajado duro durante años para marcar todos los parques nacionales de su lista de deseos. Planean visitar el Parque Nacional de Samoa Americana antes de que finalice 2023.

La inspiradora historia de Joy nos enseña que nunca es demasiado tarde para cumplir tus sueños y seguir tu pasión. Ella disfrutó cada parte de sus viajes gracias a la compañía de su amado nieto.