Doctores ofrecen a padres abortar a bebé 'deforme', y se negaron. Ahora, ¡luce adorable!
Tener un hijo es una enorme responsabilidad, y los padres en la dulce espera deben poder mantener a su futuro hijo, pero también deben estar dispuestos.
El 8 de octubre de 2016, Sara Heller dio a luz a un bebito llamado Brody. Pero incluso antes de que naciera, Sara y su esposo Chris supieron que no sería como los demás niños.
Brody desarrolló una deformación estando en el vientre, la cual ya era visible en el ultrasonido que Sara se realizó a las 24 semanas. Fue diagnosticado de labio y paladar leporinos, reseña WOWT 6 News.
Los doctores les preguntaron si querían quedarse con el bebé, o si preferían buscar mejores opciones. Pero para Sara y Chris, que ansiosamente habían esperado la llegada de Brody, la mejor opción era él.
Cuando posaron sus ojos sobre él, su deformidad no les importó. Para ellos, él era hermoso, y estaban determinados a asegurarse de que todos lo supieran, publicando fotos de él en Instagram.
Eligieron quedarse con Brody, no sólo porque lo aman, pero también porque querían educar a otros padres sobre las deformaciones leporinas, que pueden ser una condición bastante muy difícil.
Sin una cirugía, la gente que nace con labio leporino puede sufrir problemas para alimentarse, beber, respirar y hablar. La mayoría de los padres eligen una operación para arreglar el programa.
Tras mostrar a Brody en sus cuentas de redes sociales, los Heller recibieron una increíble cantidad de apoyo, pero también hubo gente grosera preguntando qué le pasa a la cara del bebé.
En vez de confrontarlos, Sara decidió simplemente explicar que la deformación es resultado de tejidos que no se fusionan adecuadamente.
Según reporta Parenting isn't Easy, Sara y Chris recibieron una donación anónima de 1.000 dólares estando con Btody en un restaurante, la cual usaron para cubrir algunos de sus gastos médicos.
"Espero que continúe siendo nuestro chico especial perfecto y que algún día pueda hacer algo grande por alguien", dijo Sara.
El labio de Brody ha sido reparado gracias a la operación, aunque aún le queda una pequeña cicatriz bajo la nariz. Está perfectamente sano y es un bebé feliz, como lo evidencian las fotos en la página de Instagram de su mamá.