La barriguita de la Duquesa Kate ha crecido notablemente y su nueva foto lo demuestra
Dicen que el semblante de una mujer se hace más brillante cuando está embarazada. Algunos consideran que no hay una etapa en que una mujer se vea más radiante y hermosa que cuando está a punto de dar a luz.
Así parece demostrarlo la Duquesa Kate Middleton, que dará a luz el próximo abril, y cada vez se ve más hermosa con su barriga de embarazo. Ella no pierde el estilo a la hora de vestir y lucir su maternidad. Hace poco estuvo de visita en la Escuela Primaria Pegasus en Oxford, Inglaterra y según Closer Weekly, lució realmente radiante.
Según informaron, Kate usó el mismo vestido que durante su visita a Downton Abbey en 2015, cuando estaba embarazada de 8 meses de la Princesa Charlotte. Y esta no ha sido la única vez que ha repetido atuendo.
A mediados de enero, se puso un abrigo rosa que llevó dos veces cuando esperaba a Charlotte. Kate tiene claro cuáles son los vestidos que mejor le sientan durante esta etapa y los que la hacen sentir más cómoda para lucir el embarazo.
En octubre de 2017, Kate visitó la estación de tren de Paddington en Londres con William y el Príncipe Harry, esa fue la segunda vez que mostró su creciente embarazo.
A principios del otoño pasado, la madre de dos hijos hizo su primera aparición pública en el Palacio de Buckingham, después de revelar que estaba embarazada nuevamente.
La Duquesa se ha preocupado por no dejar de lado sus compromisos reales mientras está embarazada, y recientemente ha hecho varias apariciones en público.
El 27 de febrero de 2018, visitó el Royal College of Obstetricians and Gynecologists de Londres, en esa ocasión lució un traje azul que muchos interpretaron como la forma en que anunciaba que su bebé era un varón.
Desde que anunció su embarazo muchas habían especulado que se trataba de otra niña y hasta enviaban mensajes a los príncipes para sugerir posibles nombres.
Este último embarazo no fue fácil en un principio, ya que a Kate la diagnosticaron nuevamente iperémesis gravídica, que un trastorno caracterizado por náuseas y vómitos intensos y persistentes.
Afortunadamente, esta etapa ya fue superada y la Duquesa y su pequeño se encuentran muy bien. Ella no necesitó cuidados especiales y ahora está feliz y ansiosa por recibir a su hijo.