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Hermosa joven intenta entrar en un autobús. De repente, un extraño la agarra por la espalda

Vanessa Guzmán
24 abr 2018
22:29

El humor puede ser un gran aliado para lidiar con el estrés. Las bromas, las conversaciones ingeniosas y una buena carcajada al día son beneficiosos física y psicológicamente.

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Además, un elemento clave de los chistes es que te obligan a mirar una misma situación de diferentes maneras.

Por ejemplo, cuando esta mujer anunció un nuevo matrimonio su amiga quedó sorprendida al conocer la verdad detrás de la muerte de sus 3 maridos anteriores.

Lo que le ocurrió a esta chica en un autobús es bastante peculiar, pero lo más impactante fue la respuesta del hombre que intentó ayudarla.

Imagen tomada de Shutterstock

Imagen tomada de Shutterstock

Una ciudad abarrotada en una concurrida parada de autobús, una hermosa joven con una apretadafalda de cuero estaba esperando subir a la unidad de transporte.

Cuando el autobús se detuvo y fue su turno de subirse, se dio cuenta de que sula falda era demasiado apretada para permitir que su pierna subiera a la altura del primer escalón del autobús.

Ligeramente avergonzada y con una sonrisa rápida al conductor, ella alcanzó detrás de ella desabrochar un poco la falda, pensando que esto le daría suficiente flacidez para levantar su pierna.

Intentó volver a dar el paso, solo para descubrir que no podía.

Así que, un poco más avergonzada, una vez más se inclinó hacia atrás para descomprimirsu falda un poco más, y por segunda vez intentó el paso.

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Una vez más, para su vergüenza, no podía levantar la pierna.

Con una pequeña sonrisa al conductor, ella nuevamente se acercó para desabrochar un poco másy otra vez no pudo dar el paso.

Por esta vez, un tipo grande que estaba parado detrás de ella la tomó fácilmentepor la cintura y la colocó suavemente en el escalón del autobús.

Se volvió loca y volteó hacia el aspirante a samaritano.

"Cómo te atreves a tocar mi cuerpo! ¡Ni siquiera sé quién eres!".

El tipo sonrió y soltó las palabras: "Bueno, señora, normalmente estaría de acuerdo usted, pero después de que descomprimieras mi mosca tres veces, me figuré que éramos amigos".

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