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José María Íñigo ha muerto a los 75 años

Valeria Garvett
08 may 2018
00:23

Esta leyenda del entretenimiento español ha fallecido a tan solo 75 años de edad.

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De acuerdo a lo informado por El País, José María Íñigo, la personalidad de televisión y radio española, ha muerto mientras dormía, así "como él quería", según indicó su esposa.

Íñigo nació el Bilbao, en 1942, pero partió de este mundo el sábado 5 de mayo de 2018, en su hogar de Madrid. Pepa Fernández, presentadora del programa de RNENo es un día cualquiera’, anunció la triste noticia.

A pesar de que los mejores años de José María transcurrieron en la década de los 70, seguía muy presente en los medios de comunicación españoles, en la actualidad. No había persona que no conociese de su existencia.

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Hace más de cinco décadas, dos chicos de Bilbao, Pedro Olea y José María Íñigo, en complicidad con un joven de San Sebastián, Iván Zulueta, hicieron posible un insólito programa musical para la televisión española.

El show, cuyo título ‘Último grito’ enfatizaba su vocación vanguardista, era presentado por Íñigo, cosa que lo hizo famoso a tan solo sus 25 años. Su carrera y pasión por el periodismo comenzó a sus 18, y sentía especial atracción por la radio musical.

En Bilbao, Madrid y Londres se empapó de las últimas tendencias en unos años decisivos del pop y el rock. Asimismo, en 1969, el musical de TVE, 'Ritmo 70', empezó a ser conducido por él y, un año después, comenzó a presentar el programa que le consagró, 'Estudio Abierto', que se basaba en entrevistas, reportajes y actuaciones en directo.

Estudio Abierto tuvo gran éxito, cosa que le abrió las puertas a Íñigo, volviéndose presentador de otros programas como 'Directísimo', 'Esta noche... fiesta', 'Fantástico', entre otros.

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Luego de haber aparecido cientos de veces en la pantalla española, se volvió un icono mediático de la Transición y, su bigote, el más popular de la nación.

Sin duda, este hombre dejó huella en la televisión española y en el corazón de miles de televidentes.

José María Íñigo fue señalado como mejor presentador –en los Ondas o en los TP de Oro- en 1971, 1974, 1975, 1976, 1978, 1979 y en 1983, en la segunda época de Estudio Abierto. Tales reconocimientos representan indudablemente sus momentos más brillantes, donde se volvió un mito de la TV.

Asimismo, su fanatismo por los viajes, el turismo, la música y la misma TV le permitió crear revistas y escribir varios libros. Incluso después de que su época dorada pasó, en 2011, la Academia de Televisión le concedió el premio Toda una vida.

Tan grande talento será sumamente extrañado. Que descanse en Paz.

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