Los siete niños mayores de Turpin fueron liberados del Centro Médico Regional Corona
Los niños están aprendiendo a ser independientes.
De acuerdo a lo reseñado por ABC News el 19 de marzo de 2018, luego de vivir un infierno siendo víctimas de sus propios padres, ahora están seguros y alegres.
Actualmente los siete chicos están viviendo juntos en una casa, donde cada uno tiene su propia habitación.
Luego de haber sido dados de alta el 15 de marzo de 2018, los jóvenes fueron llevados a un hogar rural en el estado de California, para que pudieran estar en tranquilidad y rehagan su vida.
Según ABC News, cualquier persona que tenga la oportunidad de interactuar con ellos, se dará cuenta de que son unos chicos alegres, cálidos y encantadores.
El abogado Jack Osborn, quien ha llevado el caso de los Turpin, afirmó que los siete niños mayores, con edades comprendidas entre 18 y 29 años, egresaron del Centro Médico Regional Corona un día jueves.
Los niños Turpin, que son 13 en total, también son conocidos como los "13 magníficos", ya que sobrevivieron a años de torturas y malos tratos a manos de sus propios padres.
Ellos fueron rescatados por agentes policiales en enero de 2018, evidenciando que habían sido esclavizados y encadenados a los muebles por David y Louise Turpin, quienes terminaron encarcelados por sus crímenes.
Los mayores de los hermanos quieren ser conocidos como sobrevivientes, no como víctimas, reveló Osborn, quien comentó que fue muy divertido reunirse con ellos.
"Son alegres, cálidos, considerados. A pesar de lo que vivieron, se interesan por los demás, y no pretender ser el centro de atención de todos”, afirmó el abogado el 19 de marzo.
Los niños más pequeños, de entre 2 y 17 años, fueron dados de alta del hospital y se dividieron entre dos hogares de crianza.
Osborn reveló que a los chicos les encantaba cualquier comida fresca. Los niños de Turpin disfrutan de las frutas, pastas y sopas.
Los jovencitos, que habían sido privados de alimentos y por consecuencia terminaron desnutridos bajo los cuidados de sus padres, pasaron sus primeras 24 horas fuera del hospital recogiendo cítricos, preparando comida mexicana y comiendo helado.
Sus padres están encarcelados, con una fianza fijada de 13 millones de dólares. Ambos fueron acusados de 12 cargos de tortura, detención ilegal, 7 cargos de abuso a un adulto dependiente y 6 cargos de abuso infantil.
Según Daily Mail, David también enfrentaba 1 cargo de acto lascivo con un niño. Ambos padres se declararon no culpables.